«¿Pueden mandar una botella de champán y una cena omakase?«

¿Puede ser Emma Frost una de las mejores cosas que le hayan pasado a la serie de Iron Man? La química, la manera de entenderse, la manera de funcionar de la Reina Blanca y Tony Stark está siendo tan interesante y divertida que, salga como salga toda esta aventura, un servidor es de la opinión de que todo lo que aquí leemos va a tener su poso en los autores que cojan a uno o a otro personaje en el futuro. Me resulta muy guay verles actuando como parejita feliz para luego cambiar radicalmente y lanzarse al tajo Y me gustaría pensar que todo esto pudiera durar mucho más allá de todo el lío de Orchis, Feilong y Krakoa. No para siempre (que ya sabemos que esa palabra no existe en el vocabulario marvelita), pero sí lo suficiente como para que su unión nos recuerde a las de T’Challa y Tormenta o Peter Parker y Mary Jane… algo simplemente natural.

El propio Gerry Duggan parece divertirse haciendo que el bueno de Tony comience a darse cuenta de que está disfrutando de su nueva situación, por delicada que ésta sea. Y luego están esos detalles (como el del álbum de las Cucos) que le pegan tanto y que le han valido tantas alegrías como disgustos en el pasado. Todo ello mezclado con la manera de ser de Emma, que no deja nunca entrever demasiado, pero a la que tampoco vemos incómoda haciendo esta versión del Sr. y la Sra. Smith. Qué queréis que os diga, le pese a quien le pese este enlace de marca blanca, lo cierto es que Duggan ha dado con la clave para ofrecer una trama que le hace tremendo bien a las dos colecciones a su cargo y que redunda en nuevos horizontes y posibilidades para el Vengador Dorado.

«Estoy acostumbrado a sentirme frustrado contigo, pero esto lo excede todo«

Por detrás de todo esto, qué duda cabe, siempre estará la sombra de Kingpin, los favores que le deben y la incapacidad de Tony para cruzar ciertas líneas que la Reina Blanca ya ha traspasado varias veces cuando ha considerado que merecía la pena el trauma por el premio. Es muy posible, de hecho, que todo esto sea lo que, a la larga, acabe con cualquier espejismo de relación cien por cien romántica entre estos dos personajes. Pero bueno, soñar es gratis y en El Invencible Iron Man #11 (#156) estamos aún de Luna de Miel, así que toca sacar el bañador, ponerse crema solar y disfrutar antes de que los quehaceres cotidianos de héroes y mutantes vuelvan a llamar a la puerta de estos dos personajes de moda.

El Invencible Iron Man #11 (#156): Caída de X

Lo que queda bien claro es que, aparte de la nueva armadura de infiltración (que ya hemos visto que no es infalible), se avecina un nuevo juguete en el armario de Tony que pretende convertirse en la pesadilla de los Centinelas de Feilong al tiempo que nos promete un buen espectáculo para el momento en que toque devolverle a Orchis todos los favores que le ha hecho a los héroes de todos los colores durante los últimos meses. ¿Deberá devolvérsela a la que hoy por hoy es su mujer cuando todo esto acabe? ¿Cómo está procesando interiormente ella toda esta etapa? Mira que llevo ya unos años siguiendo de cerca las aventuras de esta cabecera de Panini y pocas veces he estado tan enganchado a ella como lo estoy ahora.