«No sé, jefe. Esta peña tiene una vibra problemática«

No se lo está poniendo fácil Gerry Duggan a los integrantes de la Patrulla-X. Tres números de la colección llevamos y otros tantos villanos de recorrido más o menos largo han aparecido a las puertas de la arborescente mansión de los héroes de la nación mutante de Krakoa. Por un lado está Cordyceps Jones, que es quien probablemente vaya a durar menos como antagonista de nuestros héroes (máxime ahora que estos saben de su existencia). Por otro está Feilong, el niño rico cabreado porque los mutantes se le adelantaron en la conquista de Marte y que se alía ahora con gente tan peligrosa como los integrantes de Orchis. Y por último se nos presenta hoy el Alto Evolucionador, un enemigo que llevábamos tiempo sin ver aparecer por las páginas de las colecciones de la Casa de las Ideas y que, ahora que los mutantes han dado un paso adelante en su evolución, tiene mucho sentido que aparezca para medirse con ellos.

Exceptuando el primero de estos tres (que aunque aún no veamos cerca su arco argumental, éste no parece ir a ser de los especialmente prolongados), el resto nos preparan para tramas largas y de calado. Lo de Orchis es por todos los lectores de las cabeceras mutantes conocido, pero la llegada ahora de Herbert E. Wyndham y de su hija Luminous tiene pinta de regresar dentro de no demasiado con una amenaza verdaderamente compleja (el Alto Evolucionador siendo capaz de crear bichas capaces de adoptar  cualquier poder, ¿qué mal puede haber en ello?). Además, y con todo lo que está pasando a la vez con Magneto y la Bruja Escarlata, resulta interesante que Duggan traiga de vuelta a la villana que aúna los poderes de los ‘hermanos’ Maximoff. ¿Otro detalle más que nos acerque al regreso de Wanda y Pietro a las filas de los mutantes? Quién sabe.

«Has robado el fuego a los dioses y vivido para contarlo«

Pero lo más peligroso que se cierne sobre los mutantes desde las páginas de esta serie lo vemos al final de este número, cuando el auto denominado Doctor Estasis le hace llegar a Ben Ulrich los papeles que prueban que Cíclope murió hace no demasiado tiempo y que ahora vuelve a caminar entre los vivos. Nos deja esto (y otros detalles que hemos leído anteriormente) claro que la mayor parte de la humanidad no sabe acerca de los protocolos de resurrección mutantes. El motivo de este secreto me parece claro: los mutantes han ‘compartido’ generosamente sus flores curativas con el resto de los habitantes del planeta Tierra y éste trato ya ha levantado cientos de suspicacias. ¿Qué ocurrirá cuando la humanidad sea consciente de que los mutantes han burlado a la muerte? ¿Serán igual de recibidos en lugares donde ésta campa a sus anchas? ¿Se buscarán excusas y excepciones que justifiquen la resurrección de otros? ¿Qué hay de la enorme base de datos genéticos que contiene Cerebro? ¿Qué ocurrirá si la información trasciende y más gente averigua la ‘receta’ para traer a otros del más allá?

Patrulla-X #3 (#122): Reinado de X

Cierro con el bonito detalle de esas viñetas con Sincro y X-23. Es apenas un roce y está destinado a herir levemente a Sincro para que éste pueda ‘donar’ una gota de su sangre, pero el tiempo parece detenerse en las pocas viñetas que esta acción tiene lugar y volvemos a pensar en la preciosa historia entre estos que va quedando cada vez más atrás y que, si no rescata el propio Duggan, mucho me temo que caerá en el olvido para futuros autores de la galaxia mutante.