Planeta Cómic, como ya hiciera con Cráter, nos trae un nuevo recopilatorio de historias breves escritas y dibujadas por Osamu Tezuka. Una forma ideal para acercase al trabajo del dios del manga si no se tiene mucha idea de por donde empezar o si no se quiere abordar lecturas largas. Teniendo en cuenta, eso sí, que estamos ante el «Tezuka oscuro».

«¡Midori! ¡Despierta! ¡Mira, las estrellas!«

Y hablando de Cráter, resulta muy interesante poner Bajo el aire en relación a esta, pues compartiendo formato (los relatos cortos), se palpa la evolución temática del autor. Las historias recopiladas en este libro datan de 1971-1972, mientras que las de Cráter son de 1969-1970. El pesimismo del autor y su mirada oscura y trágica se acentúa muchísimo, al tiempo que el elemento fantástico se va diluyendo. Algunos de los relatos incluidos, como Bajo el aire (que da título al libro) o Sangre felina, conservan ese componente sobrenatural o de ciencia ficción, pero otros tantos, como Duelo en Grand Messa o El hombre y el acantilado, tienen un encaje más realista y ponen el foco en la psique y la transformación interna de sus personajes.

La tragedia es la nota común a los relatos aquí recogidos (catorce en total). Ya sea buscada por los propios personajes (responsables muchas veces de sus propias desgracias) o por causas ajenas a ellos, la fatalidad está siempre presente. Esto no implica, sin embargo, que los personajes deban morir al final de sus historias, al menos no de forma literal. Sí, implica, en cambio, la visión de sus propias miserias o las del mundo que les rodea (tanto de sus seres cercanos como del mundo en general), les lleva a una profunda transformación. La excepción la ponen las dos aventuras protagonizadas por Osamu Tezuka (el mangaka es incapaz de evitar la tentación de caricaturizarse y mimetizarse en un personaje), pues en ellas él no pasa de ser testigo y protagonista accidental de las desventuras de los demás.

Como en muchas de las obras de la época, la amenaza nuclear, la corrupción y el capitalismo sin escrúpulos o la guerra son algunas de las preocupaciones capitales que flotan en el ambiente de la obra, siempre desde una estimable perspectiva crítica. Temas que, en general, son igual de válidos 50 años después de su publicación original. La cuestión es, ¿esta vigencia habla bien del trabajo de Tezuka para retratar la sociedad o -precisamente- habla mal de la sociedad que hemos creado en este medio siglo?

La anterior edición, publicada en tapa blanda por Dolmen Editorial (la de Planeta es en tapa dura), incluía dos relatos más: La nueva virgen y La ejecución terminó a las tres. El motivo de su ausencia lo desconocemos, aunque dado el esfuerzo de Planeta Cómic por recuperar y publicar todo el trabajo de Tezuka, raro será que no acaben apareciendo en algún volumen futuro de esta Biblioteca Tezuka.