Tienes mala cara. De haber hecho caso a tus amigos y no comerte esa hamburguesa ahora no estarías en esta situación. No solo te has comido a tu familia y has iniciado el Apocalipsis, sino que te has muerto sin poder declararte al amor de tu vida y ahora solo puedes pensar en saciarte a base de cerebros mientras esperas a que alguien te vuele la cabeza y ponga fin a tu anodina existencia. Eres un maldito zombie, normal que tengas esa cara.
Pero tú no eres como los demás, eres un romántico empedernido, de esos que creen que el amor lo puede todo, incluso superar el «hasta que la muerte nos separe». Debajo de capas de carne podrida late un pequeño corazón que se niega a sucumbir a la idea de que todo ha terminado. Por eso estás ante la puerta de la chica que te gusta, con un ramo de flores en una mano y con el brazo de su padre en la otra. Un muerto previsor vale por dos. Sabes, además, que no estás solo. Zombies y muertos de diversa índole ya han saboreado las mieles del amor antes que tú. Tienes mejor aspecto.
R y Julie
Siendo la más reciente, la historia de R es a la que te agarras para conquistar a tu amada. Él encontró a su particular Julieta aún con todo en contra, pues tuvo que lidiar con un novio con complejo de pagafantas y una horda de «huesudos» que no veían con buenos ojos ni a humanos ni a los zombies corrientes. Por no hablar del suegro: John Malkovich. Ese sí que era duro de roer, aunque comprensible ya que solo buscaba lo mejor para su hija. Y un zombie sin oficio ni beneficio que coleccionaba cachivaches varios no parecía el mejor partido.
–¡Igualico, igualico que el defunto de su agüelico! –Hum, verás…
Y eso que R era guapo. No como el pobre Johnny. ¡Qué muerto de novio! El día que va a pedirle a Missy si quiere ir al baile del instituto con él, van y le meten un tiro en el pecho. Otro romántico al que la muerte no pudo retener y un día después de ser enterrado salía de la tumba con si tal cosa. Con mucha más labia que R (y mejor vestuario) no solo conquistó a la chica, sino que puso a todo el pueblo en su contra, entre los que destacaban unos jovencísimos Philip Seymour Hoffman y Matthew Fox a los que la edad y las calabazas de Missy les han sentado la mar de bien.
Dominación femenina
La experiencia nos dice que no hay nada más temible que una muerta enamorada de un vivo. Posesivas y perversas han consumido el alma de más de uno. Seguro que conoces la historia del joven Victor Van Dort y como fue arrastrado, literalmente, al mundo de los muertos para contraer matrimonio con una novia cadáver. Por suerte para él unos defectos de forma anularon su mortal matrimonio.
Los hay con mala suerte y luego está Rupert Everett. Impotente y enterrador en un pueblo perdido de Italia, ¿no es para deprimirse? Si además su amante fetichista recibe un mordisco de su difunto marido, no digamos. Viva o muerta la viuda sabía como hacer que los hombres perdieran la «cabeza» por ella. Por no hablar de la jovencita Valentina. La hija del alcalde lo fue todo para el ayudante de Everett, antes y después de pasar al otro barrio. Si vieras los informativos te darías cuenta de que Italia se ha convertido en un país de locos, normal que sucedan estas cosas.
¿Alguna vez perdiste la cabeza por tu chico? No. No lo hiciste.
Aunque para mujeres dominantes (u hombres calzonazos) el trío que formasen Madeline Ashton, Helen Sharp y Ernest Menville. «La muerte os siente tan bien» solía decirles el cirujano plástico a sus dos amadas, un pelele que vivía por y para ellas; unas «muertas» que vivirían eternamente. Se comenta que siguen a la caza de algún joven con manos talentosas. Por suerte, aquí el muerto eres tú y estás a salvo de las amantes de los vivos.
Planes de futuro
¿Nervioso? No temas, si la enamoras será para siempre. Más cuando ese amor se sella ante Dios, como bien pueden atestiguar los Zanders. Danny «cayó enfermo» al poco de comenzar su luna de miel y Denise, abnegada esposa, decidió quedarse a su lado a pesar de su estado terminal. Eso sí que es una zombie honeymoon en toda regla.
Una prueba de amor muy similar a la de Koldo hacia Clara después de una boda que sonaba al ritmo de Tino Casal.
Manuel. Tu madre ha vuelto a morder al tío Paco.
Muertos de amor
Pero si la chispa del amor no prende y al abrir la puerta intenta matarte y te rechaza, ¡no te agobies! Ella se lo pierde. Siempre te quedará juntarte con alguna muerta enamoradiza como Lizzy e irte a una bonita granja. Junto a su novio Gary hizo este enternecedor vídeo desde Nueva Zelanda.
Además, aparte de los borrachos, ¿quién iba a entenderte mejor que otro zombie? Habrás oído hablar de Zombie Town ¿no? Allí viven felizmente Cindy y Tim sin injerencias humanas. Mientras estaba vivo Tim siempre fue un poco pardillo (como tú, para qué engañarnos) y no fue hasta después de infectarse y de que le reventaran el pecho, que se lanzó a por su chica. Estuvo diez años ¡diez años! guardándose sus sentimientos. Pero como dicen, «nunca es tarde si la dicha es buena» y ahora están recuperando el tiempo perdido, no te imaginas cómo.
No digo que tengas que «convertir» a tu amada; no necesariamente. Solo que es una opción. Aunque tú eres de los que prefieren sentir el calor corporal y evitar el olor a putrefacción. No te conformas con poco, no.
Amor tras el fin del mundo
Antes de que toques a esa puerta, una última advertencia, por si no habías pensado en esa posibilidad. Tras una catástrofe como esta muchos suelen refugiarse en los brazos más insospechados y el más temeroso de los pececillos puede triunfar.Tampoco es que haya mucha competencia. ¿No me crees? Pues te lo digo, los rumores son ciertos. Antes de acompañar al sádico matazombies y ligarse a la pelirroja, Columbus era un inadaptado que se pasaba las noches del fin de semana jugando en el ordenador. Y ahora va jactándose de sobrevivir en Zombieland y de tener una familia.
Un día normal en según qué barrios
Créeme, hasta el peor de los novios, solo por estar vivo tiene más opciones de volver con su ex que el más agradable de los muertos. Antes había por la zona un bar, el Winchester (seguro que te suena), en el que Shaun se encerró junto a su mejor amigo, su exnovia Liz y familiares varios. Habría sido una brillante idea de no ser porque ese bar fue uno de los motivos que llevó a Liz a romper con Shaun. Pero como te digo, la sangre les circula por las venas y voilà, nueve años han pasado de aquello y siguen juntos.
No intento desanimarte, pero como decía al principio, un muerto previsor vale por dos.
Estás decidido, con mucha más confianza y mejor cara que hace un rato. Solo tienes que tocar el timbre y esperar una respuesta. Estás convencido de que saldrás victorioso. Los antecedentes hablan por sí mismos, pero todo es posible.
Tocas el timbre. No contesta nadie. Insistes y en el interior, a lo lejos se escucha «¡ya voy!«. Es ella. No te pongas nervioso, ahora no. Oyes sus pasos, que se detienen al otro lado de la puerta. Silencio. Sabes que está observando por la mirilla. Tras unos interminables segundos oyes como quita las cerraduras. Y abre la puerta…
¿Será una bala o un beso?
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