Shredder’s Revenge de las Tortugas Ninja, Absolum y Street of Rage 4 son tres propuestas que han elevado a Dotemu como una de las compañías de referencia en el arte de hacer beat’em up. De las dos primeras propuestas, además, ya dimos cuenta en la revista cuando fueron lanzadas en formato digital. Ahora con Marvel Cosmic Invasion vuelven a demostrar que lo suyo no es flor de un día.

 

Así, junto a Tribute Games (desarrolladores también del juego de TNMT) adaptan la mitología marvelita a una propuesta de corte clásico que evoca al arcade de Konami de La Patrulla-X de 1992 o al Punisher que salió un año después (y que ahora podemos disfrutar en el recopilatorio Marvel vs. Capcom Fighting Collection). Porque con una duración acorde a los estándares actuales (la campaña de Cosmic Invasion nos ha llevado poco más de cinco horas, mientras que a los clásicos citados les costaba llegar a la hora completa), estamos ante un título a la altura de los grandes del cosmos marvelita.

 

 

Y lo hace con una aventura que pone a Annihilus como principal amenaza. El amo y señor de la Zona Negativa se propone conquistar la Tierra (y el universo) con la colaboración (a veces interesada, a veces obligada) de destacados personajes del rinconcito cósmico del universo Marvel. Porque si bien es cierto que personajes como Spiderman o Capitán América forman parte del plantel más por peso histórico y mediático que otra cosa y que falta, por ejemplo, algún miembro de Los 4 Fantásticos (Annihilus nació en las páginas de su colección), la selección de personajes (tanto héroes como villanos) resulta bastante coherente y equilibrada, acudiendo tanto a iconos de la editorial como Thanos o Fénix, hasta personajes de nuevo cuño como Knull, el dios simbionte.

 

La historia no reviste mayor complejidad, siendo más una excusa para visitar diferentes lugares que otra cosa, pero respeta el legado marvelita y se saca muy pocos conejos de la chistera. Y esto es importante porque en los juegos licenciados lo habitual suele ser justo lo contrario, que personajes y situaciones se planteen de manera contra natura a sus historias. Eso junto a su estética retro se traduce en toda una carta de amor al fan de toda la vida (de los cómics y los videojuegos).

 

Porque no nos engañemos, habrá jugadores jóvenes o neófitos que se acerquen a la propuesta, pero ni el género ni la propuesta visual les apelan a ellos, sino a un tipo de jugador que ya empieza a pintar canas. Incluso los diseños de los personajes apuestan por apariencias sacadas directamente del boom de series animadas noventeras y no a sus looks actuales (los casos de Tormenta o Veneno son paradigmáticos).

 

 

Con esto presente, la campaña nos presenta un total de quince misiones (más el tutorial) en los que visitamos lugares como Hala, Wakanda o un helitransporte de S.H.I.E.L.D. con el objetivo de acabar con Annihilus y su ola aniquiladora. Cada misión dura en torno a los 8-10 minutos y acaba con una pelea contra un jefe. Por el camino, eligiendo a los personajes recomendados por el sistema, tenemos la opción de completar tres desafíos (acertar a X enemigos con un ataque, usar tal acción X veces, no sufrir daños de un enemigo concreto…) y encontrar un coleccionable escondido en el escenario.

 

Llevamos a dos personajes a la vez (que vamos intercambiando pulsando L1) y, como es habitual en este tipo de propuestas, permite hasta cuatro jugadores a la vez. Cada personaje (hay quince en total) tiene entre cinco y ocho movimientos y una habilidad pasiva. En nuestra experiencia Phyla-Vell o Veneno resultaron poco satisfactorios, mientras otros como Capitán América o Mapache Cohete son muy divertidos de manejar. Los hay como Bill Rayos Beta o Iron Man que ya sea por el daño de ataque o por sus técnicas concretas facilitan muchísimo la vida en el desarrollo de una campaña que no tiene selector de dificultad. Lo ideal, en nuestra opinión, es combinar algún personaje tipo tanque (el mismo Bill o Lobezno pueden ser buenas opciones) con un personaje con capacidad de vuelo como Tormenta o Iron Man.

 

 

Además de la campaña Cosmic Invasion presenta un modo arcade que permite crear una experiencia a medida cambiando parámetros como la dificultad, la vida de los enemigos, la nuestra, el daño recibido… Pero hay truco. Estas opciones hay que ir desbloqueándolas, junto a nuevas paletas de colores y fichas de los personajes o las músicas del juego. Según vayamos jugando (ya sea en el modo arcade o la campaña) iremos subiendo el nivel de nuestros personajes (y mejorando algunos de sus atributos) y acumulando unos cubos que luego podremos canjearlos por las opciones y archivos coleccionables antes mencionados. Esto ayuda a alargar la vida útil de un juego que, por otra parte, tampoco reviste una gran rejugabilidad (al menos en la experiencia single player), pero este es ya un defecto inherente al género en el que se circunscribe la propuesta y no un problema del juego en sí.

 

Invasión física

Marvel Cosmic Invasion llegará también en edición física, aunque para ella habrá que esperar hasta el próximo 13 de marzo de 2026. Meridiem Games es la encargada de traer el juego a España y lo hará Nintendo Switch, Nintendo Switch 2 (64GB Game Cartridge) Xbox Series X y PlayStation 5 en una edición sencilla. Habrá también una edición deluxe que incluirá una steelbook, un póster (ambos elementos con el arte de la portada), 15 cartas (una por cada personaje jugable) con efectos holográficos y un set de pegatinas con los 15 luchadores a nuestra disposición.

 

Analizada la versión de PlayStation 5.