Puede que ya os hayáis enterado por aquello de que un par de medios ya lo habrán publicado a estas horas pero ayer (quizás debería decir hoy, que la retransmisión empezó en plena madrugá), se entregaron los premios esos tan bonitos y dorados con nombre de teleñeco. A lo mejor esta revista debería haber sacado un, no sé, artículo a primera hora de la mañana con la lista de vencedores y vencidos, pero qué queréis que os diga: eso es de mindundis, de gente que quiere lectores para sus webs. ¡Ja, ja, ja! ¡Lectores! ¿Quién quiere eso hoy en día?…
Tenéis que entendernos. La Noche Americana está constituida por un (poco) nutrido grupo de despojos sociales que apenas ha logrado terminar la ESO. Ayer nos dedicamos a desperdiciar lo que quedaba de fin de semana en un fútil intento por dar sentido a nuestras vidas a través del consumo desproporcionado de sustancias y esta mañana no estábamos como para hacer listas. Además, la mayor parte de nosotros escribe para webs mucho más cuidadas que SÍ han publicado la lista de marras. Tampoco deberíais quejaros, que sois unos agonías.
Pero bueno, no os preocupéis. Ayer yo saqué la pajita más corta y, en un estado de sobriedad que duró lo que pudo, estuve paneando entre la retransmisión de la 89ª Gala de los Premios de la Academia (sí, los Oscars 2017) y la fiestaca en casa de los Trump que el psicóp… presidente de los Estados Unidos convocó para contraprogramar al &%$# evento más importante del año en lo que a cine se refiere. Como estoy seguro de que todos habéis estado a tope con las travesuras del maníaco que dirige la primera potencia del mundo, vamos a ver qué es lo que pasó en el Dolby Theatre de Los Angeles.
Empezó el espectáculo suavecito, con Justin Timberlake arrastrando su cuerpo por la sala a la par que mendigaba el Oscar por su tema compuesto para le peli Trolls (título que bien podía homenajear a la práctica totalidad de internet). Le seguía un Jimmy Kimmel muy moderado, quizás porque sabía que las hostias iban a llover luego con los discursos individuales, que iba soltando alegres chascarrillos mientras daba paso al que sería el primer premiado de la noche: Mahershala Ali como Mejor Actor Secundario por su participación en Moonlight (estaba visto que la cinta tenía que abrir y cerrar la gala, para bien o para mejor). El primer premio de la historia de la Academia para un actor negro y musulmán dictaba, de alguna forma, que el actual panorama político iba a influir «un poquito» en los galardones de la noche, pero a eso habíamos venido: A ver chicha y a contemplar las ‘dagas voladoras’ camino a la Casa Blanca.
La política y los saludos a las familias de cada uno (Viola Davis mencionó a tanta gente que estoy seguro de ser pariente de alguno) se fueron alternando a lo largo de la noche quedando para el recuerdo intervenciones como la antes citada, la de la presidenta de la Academia (‘El arte no tiene fronteras. no entiende de razas ni de fe‘), la de Gael García Bernal (‘actor y mexicano (…) en contra de cualquier tipo de muro‘) o la ya conocida, pero no por ello menos impactante, ausencia del director iraní Asghar Farhadi a la hora de recoger su Premio por la Mejor Película de Habla No Inglesa (The Salesman). Por medio de una carta, el creativo se disculpó con los presentes y dijo no asistir a modo de protesta por la prohibición de viajar a los Estados Unidos que Trump había impuesto a sus compatriotas.
Pero el ‘show’ (y la justicia divina, pero sobre todo el show) quiso reservarse lo mejor para el final. Los Oscars quisieron celebrar su espíritu global y su firme deseo de tender puentes hacia el presidente electo de los Estados Unidos… repitiendo el fiasco del certamen de Miss Universo 2015 (en aquel entonces en manos del magnate norteamericano) en el que se anunció que la ganadora era la representante de Colombia para rectificar a continuación y darle el premio a su homóloga de Filipinas. Ocurre aquí que La La Land, la gran favorita de la noche, cantó victoria demasiado pronto. Los espíritus de la comedia se guardaban aún un truco bajo la manga y cuando ya se estaban los productores repartiendo el Oscar a ‘cachos’, la organización se lo quitó para dárselo a sus legítimos dueños… los de Moonlight. Muy esperpéntico todo.
En fin. Voy cerrando esto. Como yo también quiero ser popular y lo único que nuestros herederos recordarán de nosotros serán nuestras listas, aquí os dejo con todos los Premios que se repartieron anoche:
Mejor Película: Luz de Luna (Moonlight).
Mejor Actor Principal: Cassey Affleck, por Manchester Frente al Mar.
Mejor Actriz Principal: Emma Stone, por La Ciudad de las Estrellas (La La Land).
Mejor Actor de Reparto: Mahershala Ali, por Moonlight.
Mejor Actriz de Reparto: Viola Davis, por Fences.
Mejor Director: Damien Chazelle, por La La Land.
Mejor Guión Original: Manchester Frente al Mar.
Mejor Guión Adaptado: Moonlight.
Mejor Película de Animación: Zootrópolis.
Mejor Película Extranjera: El Cliente (The Salesman, Irán).
Mejor Documental: O.J.: Made in America.
Mejor Cortometraje: Sing.
Mejor Corto Animado: Piper.
Mejor Corto Documental: The White Helmets.
Mejor Banda Sonora: Justin Hurwitz, por La La Land.
Mejor Canción: City of Stars (La La Land).
Mejor Vestuario: Animales Fantásticos y Dónde Encontrarlos.
Mejor Maquillaje: Escuadrón Suicida.
Mejor Fotografía: La La Land.
Mejor Montaje: Hasta el Último Hombre (Hacksaw Ridge).
Mejor Sonido: Hasta el Último Hombre.
Mejor Edición de Sonido: La Llegada (The Arrival).
Mejor Diseño de Producción: La La Land.
Deja un comentario: