«Sólo sé que la sangre reclama sangre«

La Cazadora es uno de los personajes del universo del Caballero Oscuro que menos controlo. Por un lado es uno de esos secundarios con cierta profundidad que pueden encantarte o puedes pasar la vida sin conocerlos. Por el otro nos encontramos ante una heroína que ha cambiado muchas veces de apellido (y hasta de bando) y a la que resulta complicado ubicar. Ahora ECC publica en su colección de Grandes Autores de Batman la miniserie de Greg Rucka con la que el autor pretendió contar los orígenes de Helena Rosa Bertinelli, la versión de 1985 del personaje que, sin embargo, volvería a ser sustituida en 2011 con motivo del Nuevo Universo DC por Helena Wayne, la hija de Batman de Tierra 2.

Este escaso conocimiento me viene de perlas para acercarme a un cómic que es, ante todo, una historia sobre los orígenes de la antiheroína de la ballesta. Al leer la historia me doy cuenta de lo mucho y lo poco que se parecen La Cazadora y Batman y que precisamente es lo primero lo que los hace chocar frontalmente. Más allá del uso de un arma de proyectiles y de la tendencia a malherir (si no matar) a sus enemigos, cosa que, por otra parte, no deja de acercarla a Capucha Roja / Jason Todd, son las personalidades fuertes e independientes de ambos personajes los principales escollos para su entendimiento. El resto de los aliados del hombre murciélago son criaturas de equipo, aunque su líder no lo sea, Helena trabaja mejor sola. Tal y como siempre ha hecho Bruce.

«Ya era hora de que volvieras«

El Reclamo de la Sangre es para la Cazadora lo que El Largo Halloween fue para Batman. Es la gran historia sobre la mafia gothamita que, en esta ocasión, define y marca de manera profunda a un personaje criado en el seno de la cosa nostra y con fuertes vínculos con su vertiente original siciliana. Para ella la venganza es algo más que un sentimiento de ira hacia quien la perjudicó: es una cuestión de honor y de justicia que supera a sus propios deseos. Helena nos es presentada como una mujer segura y centrada en su misión… que no tiene muy claro si existirá un futuro para ella una vez ésta se haya visto completada. A su alrededor, personajes como Batman, Nightwing o el propio Question (mentor, amigo y algo más en este cómic) son simples herramientas para lograr un fin. La Cazadora es una suerte de Frank Castle rebajado un grado, pero igual de diligente y mortífera.

Grandes Autores de Batman – Greg Rucka: La Cazadora. El Reclamo de la Sangre

Es, por tanto, una historia iniciática (en tanto a que Helena nos cuenta sus orígenes), pero también es una historia acerca del final del camino y de las decisiones que debemos tomar cuando alcanzamos ese punto. La miniserie es ilustrada por Rick Burchett, que le imprime un cierto toque clásico y que, conociendo los vaivenes del personaje tiene hasta el detalle (en la viñeta de más arriba) de homenajear a su villanesca versión original, de 1947, como una manera de contraponer esa imagen con la de la asesina fría y vestida para la eficiencia (y no para dar tobas con los pechos) de principios de este siglo.

El Reclamo de la Sangre es una buena historia que me hace sentir curiosidad acerca de su protagonista, devuelve la acción a la calle (lejos de los trajes brillantes y de los villanos superpoderosos) y que arroja aún más sombras sobre la desafortunada versión que vimos hace unos años en pleno Nuevo Universo DC.