Ramón F. Bachs es uno de los dibujantes españoles más reputados en el mercado anglosajón, con trabajos en las dos grandes editoriales norteamericanas (DC y Marvel Comics), además de una amplia trayectoria en el universo expandido de Star Wars (cuando Dark Horse poseía los derechos), y un largo etcétera. Aprovechando su presencia en la que ha sido la última edición de Expocómic, nos ha atendido para hablar de su proceso de trabajo, su experiencia en el mercado norteamericano y anécdotas de algunos de sus trabajos más recientes.
Pregunta: ¿Cómo es tu proceso de trabajo cuando dibujas una página nueva? ¿Sigues unas pautas más o menos estrictas?
Respuesta: Bueno, normalmente voy variando el proceso según la situación, aunque suele ser básicamente el mismo siempre. Cuando recibo el guión, hago una primera lectura para ponerme en situación, y entonces empiezo con los layouts.
Suelo realizar todo el cómic entero en layout (boceto rápido) en tamaño pequeño para visualizar bien si funciona la narrativa general, y una vez aprobados paso a dibujar los lápices. En estas dos fases gasto muy poco tiempo, ya que la mayor parte de este la dedico al entintado, que es donde se va a ver el resultado final de la historia, de cara al lector.
P: Con los guionistas que has trabajado… ¿quién da más libertad? ¿Y quién es más puntilloso?
R: Buf, hay guionistas para todos los gustos… Hay quien te da un guión técnico bastante cerrado, y quien te entrega un plot más o menos abierto. Yo prefiero el guión cerrado, dividido en paginas y viñetas, pero con posibilidad de aportar detalles que no estaban desde el principio. Como digo, escritores hay muchos; a mí, por ejemplo, me gusta trabajar con Paul Jenkins, Jim Zub, Ray Fawkes o Darko Macan, que tienen un estilo narrativo muy similar. Todos ellos muy literarios pero ofreciendo a su vez bastante libertad.
P: ¿Cómo es la relación que sueles mantener con los entintadores y coloristas con los que trabajas?
R: Eso depende de tu relación previa con el editor en cuestión. Si hay suerte, pedes elegir a alguien que conozcas bien y pueda encajar con el tono de la historia. En estos casos incluso, no suelo pedirles muchos cambios o correcciones, soy consciente de que cada uno realiza su trabajo y es genial cuando todos los procesos gráficos funcionan como un reloj.
P: ¿Cómo es el funcionamiento editorial en el mercado americano?
R: Pues es muy grande y complejo, hay muchos editores que se encargan de coordinar grupos concretos de títulos y a su vez, cada editor tiene asistentes que se ocupan de otros… existe la figura del editor en jefe y del “artist manager” que son los que deciden en muchas ocasiones que dibujante encaja mejor en cada comic. Es una industria corporativista, y las grandes editoriales pertenecen a inmensas corporaciones mundiales, Disney, AOL, Time Warner… Al final, te sientes como una pequeñísima parte del engranaje que engrasa la maquina.
P: ¿Existen grandes diferencias entre la forma de trabajar en Marvel o DC a hacerlo en otras editoriales como Dark Horse o Boom! Studios?
R: No, básicamente todas trabajan de la misma manera. Tienen un sistema basado en jerarquías y cada uno está en su lugar. Evidentemente, Dark Horse y Boom! son mucho mas pequeñas, por lo que quizás no hay tantos intermediarios involucrados, aunque estas ultimas trabajan con muchas licencias de cine y television, así que también dependen de otras grandes compañías…
P: En Marvel, uno de los escritores con los que más has colaborado ha sido con Paul Jenkins, ¿cómo era la dinámica de trabajo?
R: Paul es un gran escritor, además de un tío muy majo… Él pertenece al grupo de artistas europeos que prefieren el guión técnico (o literario) al clásico plot americano, es decir, sus guiones están divididos en paginas, viñetas y textos, con extensas descripciones por viñeta. Eso no quiere decir que no se permitan cambios a la hora de realizar cada plano, sino al contrario, admite muchas variaciones que ayuden a mejorar la narrativa de la pagina. A parte de esto, la dinámica es como todas: entrega del guión (cuando esta previamente aprobado), lectura y layouts…
P: En DC has estado muy vinculado a Batman y su entorno, ¿qué crees que hace que este personaje sea tan popular dentro y fuera del medio?
R: Batman, así como Superman, es un icono de la cultura popular, ya no solo americana, sino universal. Representa perfectamente el paradigma del superhéroe inmortal… a pesar de no tener ningún poder sobrehumano. Es quizás eso lo que le da un aura de misticismo que lo hace tan interesante. Además, existe todo un universo Batman, con su panteón de héroes y villanos, que alimentan esta epopeya fantástica.
P: ¿Qué opinión tienes de los universos cinematográficos que están planteando Marvel y DC? ¿No hay peligro de una saturación del mercado con tantas películas basadas en superhéroes al año?
R: Bueno, es interesante. El cómic y el cine se retroalimentan en muchas ocasiones aunque a veces se tiende a explotar demasiado la cartelera… No es que sea negativo para el medio del cómic, pero al contrario de lo que muchos piensan, tampoco lo beneficia. El nuevo público, que es al que se pretende atraer, no suele tener mucho interés en empezar a leer cómics de Batman después de ver las películas. Y es porque, al fin y al cabo, el cine siempre será un medio de masas fácil de digerir, rápido e inmediato. Para leer un cómic, necesitas tiempo, dinero y cierto bagaje cultural, y eso no atrae…
P: Después de trabajar con el universo Star Wars durante su etapa en Dark Horse… ¿Qué te está pareciendo este lavado de cara que han hecho con el “reseteo” del canon y el universo expandido a partir del Episodio VII?
R: Esto me lo han planteado muchas veces. Yo lo que creo es que, en el fondo, todo son palabras. El universo expandido siempre estará ahí, y aunque (George) Lucas haya dado la espalda a esos años de LucasBooks, LucasArts, Dark Horse, etc… Disney, por su lado, está utilizando muchas ideas de ese fondo de armario que es el universo expandido. Más bien es una especie de pereza a situar y almacenar cronológicamente todos los eventos transcurridos en estos años, siendo mas fácil el coger ideas al azar, sin tener que dar cuentas cronológicas a los fans enfurecidos…
P: Háblanos de la experiencia que supuso trabajar en la miniserie Joker / Mask, que juntaba dos universos en apariencia tan distantes, y que también te permitía explayarte con un estilo más desenfadado.
R: Fue pura suerte, yo venía de un dibujo en España muy cartoon y justo me toco una miniserie a la que encajaba a la perfección ese estilo. Podría haberme tocado algo mas serio, pero hubo suerte. A partir de ahí todo fue rodado, cada vez me ofrecían series mas “serias” y evidentemente, el estilo se fue modificando paulatinamente para encajar en las mismas. Además, yo era muy fan en esa época de Bruce Timm, así que imaginate…
P: En Marvel, tuviste ocasión de participar en la primera Civil War y ahora haces lo propio con la segunda, ¿qué diferencias encuentras entre una y otra?
R: Lo peor de participar dibujando en estos grandes eventos anuales es que no te enteras mucho de todas las ramificaciones que tienen. Es decir, sabes de que va en su línea principal, pero a mí me toca siempre una pequeña parte de la historia… En la primera Civil War hubo la suerte de colaborar con Paul Jenkins y construyo una historia, que aunque formaba parte del evento principal, tenia un desarrollo propio, con personajes únicos que evolucionaban y se desarrollaban por su cuenta. Civil War Frontlines fue todo un ejercicio, tanto gráfico como narrativo, que llevaba los superhéroes a un nivel mas callejero.
P: Sin entrar en spoilers, en una de las páginas de Civil War II: El acusado, tuviste que hacer un cambio respecto a la versión finalmente publicada. ¿A qué se debía? ¿Suele ser habitual este tipo de correcciones?
R: Sí, hay una página en concreto del Acusado que me llevó de cabeza varias semanas este verano… Se trataba de una secuencia de varios personajes dando su opinión a las cámaras de televisión y había uno en concreto que tenía que representar a un senador/congresista republicano. Y cometí el error de darme demasiadas libertades al dibujar a cierto magnate de piel naranja, con lo que supuso un revuelo en la editorial. Al final, y después de cuatro o cinco cambios, y de haber intentado colar a Rajoy (sin barba) y a mi cuñado de 19 años, la editorial decidió lo que decidió, y nadie quedó contento. Pero sí, este tipo de cambios y correcciones son frecuentes cuando tienes que implicarte políticamente…
P: ¿Cómo se fraguó tu colaboración en Wonder Woman 75 Anniversary Special? La historia que ilustras tiene un componente cartoon y humorístico muy marcado, ¿pudiste elegir el relato en el que trabajar?
R: No, sencillamente me mandaron la historia en la que mas encajaba. Por mi genial… era muy desenfadada y transcurría en una famosa cadena de muebles suecos (aunque al final, y como siempre por miedos a demandas, se cambio el color y la forma del logotipo).
P: Ahora que se ha cumplido el 20 aniversario de Manticore… ¿hay planes de continuar sus historias o de momento sigue siendo un deseo lejano?
R: Es un deseo lejano desde hace 20 años. No es por falta de interés pero Busquet y yo, ahora mismo estamos bastante liados y no podríamos embarcarnos en algo así sin dedicarle todo el tiempo que se merece. Pero quién sabe…
Imágenes de Ramón F. Bachs: ramonfbachs.blogspot.com.es
Deja un comentario: