Aún asimiliando todos los récords que está batiendo Spider-Man: No Way Home en la taquilla mundial, Tom Holland tiene un nuevo proyecto dispuesto a llenar las salas de cines. Hablamos de Uncharted, la adaptación del popular videojuego del sistema PlayStation que convierte al actor en un aventurero cazatesoros. De visita en España para presentar la película (gran parte de ella transcurre en nuestro país) charlamos con Holland acerca de su trabajo en ella y de la fama.

Pregunta: Gran parte del argumento está relacionado con España, ¿hubo algún tiepo de preparación específica respecto a la cultura española?

Respuesta: No es ningún secreto que soy un fan de España desde que era pequeño; me encanta Barcelona, tengo amigos ahí. Bayona por ejemplo es una especie de hermano mayor… Para la preparaicón de la película leí algo de historia, pero es verdad que es un trabajo que hicieron por mí, porque eso ya estaba en el guion, que fue una especie de lección de historia y mi trabajo fue un poco más superficial, de Wikipedia. Siempre es emocionante, cualquier película basada en la historia y más aún en la exploración.

P: A Mark Wahlberg le gusta visitar iglesias, ¿le acompañasteis a alguna aquí en Barcelona?

R: Es verdad que a Mark Wahlberg le gusta mucho visitar iglesias, va cada mañana. Rodamos en una iglesia que era increíble y he visitado la Sagrada Familia muchas veces; Barcelona tiene unas iglesias espectaculares.

P: ¿Cómo ha sido la relación con Antonio Banderas? No pocas veces los españoles hacemos de malos en Hollywood, ¿tenemos cara de villanos?

R: (Ríe) No, los españoles no tenéis pinta de villanos. Antonio es un gran tipo, soy un gran fan suyo. Y me parece también una grandísima persona. Tiene esa voz increíble, con un dominio de todos los tonos, y es capaz de contarte una historia con calidez, pero a la vez de una forma muy intimidatoria.

P: ¿Cómo se relaciona Nathan Drake con un género que tiene iconos como Lara Croft o Indiana Jones?

R: Es verdad que hay similitudes con Lara Croft o Indiana Jones, son películas de aventura, de exploración. Esta película te permite viajar por el mundo, qué es algo que por desgracia no hemos podido hacer en los últimos dos años, así que también hay diferencias. Y por supuesto queríamos rendir homenaje a los grandes como Indiana Jones y todos esos guiños con mucho mimo.

P: Siendo una historia de orígenes, previa a lo que conocemos de los videojuegos, ¿cómo es la evolución del personaje en la película?

R: No diría necesariamente que existe un arco completo de evolución del personaje porque es verdad que cuando hablamos de películas que están concebidas para ser varias entregas -como Spider-Man-, el arco se desarrolla poco a poco y se hacen pequeños cambios. Yo lo que traté fue mostrar el proceso del personaje; por ejemplo, aquí Nathan pasa de ser una persona muy confiada a alguien más desconfiado.

P: ¿Existen paralelismos con tu personaje? ¿Eres tan confiado?

R: Sí que lo soy, y eso no siempre es bueno (ríe).

P: ¿Qué supuso coincidir con Nolan North, el Nathan Drake de los videojuegos?

R: Fue muy divertido. Compartimos una escena juntos en la película y fue un momento de reconocimiento mutuo que me gustó mucho. Siempre ha sido muy amable conmigo y ha apoyado plenamente la película.

P: ¿Cómo de importante es la preparación física para un personaje así?

R: Me parece importantísimo, la parte física es una de las principales formas de diferenciar a un personaje. Por ejemplo, si te fijas en la forma de andar de Peter Parker o de Nathan Drake, no tienen absolutamente nada que ver una con otra. Drake es una persona que no tiene un entrenamiento como tal, pero es extremadamente habilidoso. Me entrené mucho, hice muchas pesas para prepararlo; pero disfruté mucho, me lo pasé muy bien y fue una excusa perfecta para ponerme en forma. En Barcelona estuve entrenando en el hotel Arts, donde estaban todos los fans mirando por la ventana.

P: Cuando empezaste no tenías muy claro lo de ser actor, ahora que eres una estrella de Hollywood, ¿cómo asumes la fama?

R:  (Ríe) Nunca me había propuesto hacerlo, era joven en aquel momento (bueno, todavía lo soy), se presentó la oportunidad y hasta que no me vi actuando con Naomi (Watts) a las órdenes de Bayona no pensé que pudiera dedicarme a esto. Es verdad que no es algo que pienso hacer el resto de mi vida. Aunque amo mi trabajo, no disfruto especialmente el estar delante de los focos. Me parece difícil este equilibrio porque valoro mucho mi intimidad. Algún día sí que quiero tener mi familia, quiero estar tranquilo y a lo mejor producir, dirigir o hacer algo que no tenga nada que ver con la industria del cine. Es verdad que me gusta muchísimo lo que hago y me parece una gran oportunidad, pero el futuro no está necesariamente con el cine.

P: ¿Y presentar los Oscar?

R: No, no, no, no (ríe).

P: Sobre producir, ya estás haciendo tus pinitos. El hecho de producir tus propios trabajos, ¿cambia la perspectiva a la hora de enfocar ese trabajo?

R: Sí, lo hace. Me ayuda a entender más el trabajo que hay detrás de las cámaras, que antes no conocía. He sido productor en Uncharted y ahora lo voy a ser en The Crowded Room y es algo que he disfrutado mucho.

P: ¿Cómo te sientes al ver tus propias películas? ¿Eres capaz de disfrutarlas o eres muy crítico?

R: Un poco de ambas (ríe). Si la película es buena puedo disfrutarla sin ningún problema. Si la película es malísima -y créeme que las he hecho- es muy difícil desconectar, así que varía un poco. En este caso, en Uncharted, como público y como fan de los videojuegos, sí que he podido disfrutarla