Desde que su nombre se unió al de la familia marvelita Tom Holland a pasado de ser un joven actor a estrella en ciernes, aunque ya antes directores como J.A. Bayona o Ron Howard le dieron la oportunidad de demostrar su valía en el terreno de las grandes producciones. Ahora visita Madrid para presentar, precisamente, uno de esos trabajos, En el corazón del mar. La película, rodada hace dos años, le dio la oportunidad, curiosas coincidencias, de compartir cartel con Chris Hemsworth, otro de los héroes marvelitas. Sobre estos temas, así como de su experiencia en el teatro, hablamos en esta entrevista.

Pregunta: Empezando con un poco de humor, ¿qué te pasa con el agua que siempre acabas en problemas?

Respuesta: (Ríe). Sí, es una pena, porque en la vida real me encanta el agua. De hecho bebo mucha cantidad todos los días. Y me parece divertido rodar todas esas escenas en el agua.

P: En El corazón del mar tienes como mentor al primer oficial del Essex, interpretado por Chris Hemsworth. ¿En la vida real tuviste una relación similar con él?

R: En realidad mi relación con Chris no fue del todo igual a la de los personajes, sino que es más de amigos. En la película, a pesar de que se tienen cariño están separados por la jerarquía. Pero es cierto que me dio muchísimos consejos. Tuve una buena relación con él, al igual que con Ron Howard y Cillian Murphy. Cuando estoy con grandes de la pantalla como ellos, trato de limitarme a observar, pues sólo con eso ya se aprende un montón.

Tom Holland en una escena de En el Corazón del Mar

P: ¿Te sientes como un aprendiz en Hollywood, al igual que tu personaje?

R: Intento estar siempre aprendiendo y desarrollando capacidades nuevas. Creo que en caso contrario te quedas estancado. Aprendo a hacer películas diferentes.

P: ¿Te intimidaba trabajar con un director como Ron Howard?

R: No, porque me habían contado que siempre consigue que el set esté feliz. Y tenían razón. Ha sido todo un privilegio. Me parece que sabe ser un buen líder, porque es tan encantador, generoso y trabajador, que todo el mundo le sigue. Tenía 16 años cuando me ofrecieron el papel, y pensé que una oportunidad tan grande no llega todos los días.

P: ¿Tuviste ocasión de leer Moby Dick antes de rodar la película?

R: Pues si le digo la verdad, me lo pusieron entre un montón de libros para preparar el personaje. Pero lo tuve que dejar, no me dio tiempo más que a leer el principio.

P: Y en cuanto a Spiderman, personaje en el que te metes ahora, ¿has tenido tiempo de leer alguna etapa en concreto? ¿Te han dado ya alguna directriz?

R: Aún no, estamos en una fase temprana del desarrollo del proyecto. Ni siquiera tengo guión. Por ahora estoy leyendo los comics, que son muchos porque el personaje tiene 75 años de historia, pero trato de conocerlo todo. Y poniéndome en forma en el gimnasio.

Tom Holland, el próximo Spider-Man

P: ¿Te han puesto ya un preparador físico?

R: Todavía no. Lo hago por mi cuenta. Me asesora un amigo, haciendo mantenimiento. Y paso mucho tiempo haciendo abdominales. Más adelante me pondrán un entrenador personal.

P: Teniendo dos referentes como Tobey Maguire y Andrew Garfield, ¿cómo has pensado enfocar el personaje?

R: Ambos son excelentes, admiro mucho sus trabajos y es imposible no dejarse influir, pero espero tener un toque personal. Trataré de aportar al personaje, en la medida de lo posible, más humor.

P: ¿Y qué tipo de comedia te interesa?

R: Mi comedia favorita es Mi primo Vinny. Me encanta el género y me parece injusto que esté un poco infravalorado. No se reconoce en los premios grandes, como los Oscar. Si me ofrecieran una comedia aceptaría sin dudarlo. Espero que dejen margen para la comedia en el nuevo film de Spider-Man.

P: Spiderman es un personaje muy popular, con una base fan muy grande (sobre todo en EEUU), ¿estás preparado para convertirte en una gran estrella?

R: Espero que dentro de cinco años continúe siendo la misma persona. Por ahora, que conste, sigo lavando los platos y haciéndome la cama como uno más. No me pasan ni una (ríe).

Tom Holland en una escena de Lo Imposible

P: ¿Guardas buenos recuerdos de España de cuando rodaste Lo imposible?

R: Adoro este país. Vengo todo lo posible, sobre todo a Barcelona, para visitar a Juan Antonio Bayona. Hace poco estuve con él en el set de su nueva película, Un monstruo viene a verme. Le tengo mucho cariño, porque su película fue la primera que rodé.

P: Hace unos años tuviste la posibilidad de participar en el musical de Billy Elliot, ¿echas de menos el teatro?

R: Me apasiona, es bastante gratificante. Sobre todo porque se trata de un espectáculo en vivo, por lo que eres testigo de las reacciones de la gente de inmediato. En cine no pasa eso. En el corazón del mar la rodamos hace dos años y hasta ahora no he podido tener feedback, saber qué le parece a la gente. Espero volver a trabajar en los escenarios en el futuro.