Realmente hablamos del porqué de algunas cosas, pero no quedaba un titular tan guay. Panini Cómics publica una grapa doble de la cabecera arácnida en la que Zeb Wells (y el incombustible John Romita Jr.) aclaran algunos de los misterios que venían matándonos de intriga desde el comienzo de la actual andadura del (casi) siempre desdichado Peter Parker.

«¿Qué te has creído que estás haciendo en mi ciudad?«

Los hechos aquí narrados parten directamente del desenlace del último capítulo, en el que Peter y MJ veían separados sus caminos para salvar la vida. Con esta última atrapada en una Tierra alternativa, Parker tiene que correr contrarreloj para rescatarla, aún sin tener todas las piezas de un problema que a todas luces le supera.

La situación coyuntural del protagonista es indispensable para entender porqué hace lo que hace y el futuro devenir de los acontecimientos, enlazando directamente con el inicio de la etapa. Así, procurad tener a mano ese primer número para echarle un vistazo tras terminar con esa lectura, porque si bien quedan unos cuantos flecos por resolver, las preguntas más acuciantes encuentran su respuesta… para pesar de nuestro protagonista.

Entre medias, para disfrute de Romita y de los lectores, la aventura en curso permite la introducción de personajes como Capitán América o Los 4 Fantásticos. Apariciones estas siempre agradecidas (por eso de dar empaque al concepto de universo compartido entre los diferentes héroes y colecciones), pero cuyas interacciones no dejan en buen lugar al escritor, que parece no conocer (o no tener en cuenta) el historial de los invitados y los hace actuar de forma tan genérica que bien podríamos poner en su lugar a cualquier otro personaje disfrazado del extenso plantel marvelita. Cumplen su cometido dentro de la narración, sin más.

Uno de los grandes atractivos de esta etapa con Zeb Wells al frente consistía precisamente en alimentar el misterio de qué había pasado con MJ para aparecer emparejada y con niños y por qué todo el mundo parecía tener a Peter en su lista negra. Todo el mundo salvo el otrora malvado Norman Osborn. Presuponiendo que en las dos o tres próximas entregas el guionista podrá estirar el chicle de las explicaciones, ¿qué pasará después? Se avecinan tiempos de cambio en la colección y está por ver si Wells tiene algún nuevo as bajo la manga o superado el factor sorpresa comenzará un largo y angustioso declive.