«Tu idea es brillante, ojalá se me hubiera ocurrido a mí«

No os voy a engañar. Yo ya le echaba de menos. Durante unos meses, desde su retorno a la vida, hemos tenido en España la resurrección de una historia olvidada de Iron Man mientras esperábamos a que Panini alcanzara la mágica cifra de cien números de la colección del Vengador Dorado, pero no ha sido más que un parche mientras Dan Slott (Superior Spider-Man, Los Cuatro Fantásticos) y Valerio Schiti (Guardianes de la Galaxia, Thor) se preparaban para desembarcar en la colección y ponerlo todo patas arriba a base de volver a los conceptos básicos de la colección y darles una nueva vuelta de tuerca (a ver qué sale).

Para empezar nada mejor que una saga introductoria que nos permita entrar en contacto con los principales actores de esta etapa, sus villanos y sus tramas principales y secundarias. Casi tan importante como el protagonista, un Tony Stark que goza de una segunda oportunidad en la vida y que quiere aprovecharla siendo mejor héroe, mejor persona y aprendiendo a trabajar en equipo, son todos los personajes que le acompañan y me parece de justicia detenernos brevemente en algunos de los principales acompañantes del Hombre de Hierro en esta nueva era.

Para empezar tenemos a la pelirroja de rigor, que no es ni Pepper Potts ni Mary Jane Watson, sino una vieja conocida del personaje (Bethany Cabe), que viene a hacer de guardaespaldas, niñera y piedra angular del argumento sobre el que va a pivotar la serie durante esta temporada. Al igual que hizo Brian Michael Bendis con la ex de Peter Parker, Slott renuncia a convertir a Cabe en un mero interés amoroso para el héroe y esto es una demostración más de cómo están cambiando los tiempos en el mundo del cómic. En Tony Stark: Iron Man hay paridad entre personajes masculinos y femeninos, sí, pero más importante que eso es la huida que protagoniza el guionista de los viejos esquemas de género. Y esto son muy buenas noticias.

«Por favor, el ‘Sr. Stark’ era mi padre«

Comienza el cómic presentándonos a un nuevo personaje, Andy Bhang, que pasa por ser un viejo rival de Tony reconvertido ahora en su líder de la sección robótica. Bhang funciona a la vez como personaje ajeno a la locura de Iron Man que se alucine con cada nueva locura del protagonista, en el más claro ejemplo de su nuevo espíritu de equipo y en alivio cómico al ser un señor adorable que parece siempre estar un poco fuera de lugar dentro de la vorágine de Stark Ilimitado (el enésimo nombre para el conglomerado de empresas del héroe). Junto a él veremos cada vez más a la madre biológica de Tony (la Amanda Armstrong que presentara Bendis en Stark International), un personaje que se ha negado desde su creación a permanecer esperando en las sombras a que su hijo le de un susto y que aquí vuelve a demostrar unas cuantas veces que su pasado como agente de S.H.I.E.L.D. no ha sido olvidado.

Tony Stark: Iron Man #1

Me dejo para el final a los que considero como los caracteres más interesantes de esta primera entrega. Por un lado tenemos al eterno James Rhodes (el coronel, no el pianista), que vuelve, como Tony, de la muerte que encontró a manos de Thanos para reincorporarse al servicio activo a modo de enlace entre los negocios de Stark y el ejército de los Estados Unidos. Con Rhodey tenemos la oportunidad de explorar el Síndrome del Estrés Post-Traumático al ponernos tras los hombros de un hombre muy consciente de su propia mortalidad cuando pilotaba la armadura de Máquina de Guerra. El cambio al que se enfrenta en esta nueva etapa lo aleja de las armaduras, pero no de la esfera de su amigo y protegido. Y por último está Yocasta Pym. La que fuera una especie de clon de las pautas cerebrales de la Avispa (que sí, también sale en este número, pero de forma más testimonial) se convierte en la protagonista de algunas de las reflexiones más interesantes del cómic. A ver si os suena de la vida real: Yocasta es una androide que lucha por los derechos de los de su raza (máquinas con consciencia) y que quisiera ser aceptada y sentirse integrada en el mundo de los humanos. Sin embargo, esto resulta complicado cuando el color de tu piel (metálico y cromado) se interpone y más aún cuando tu propia pareja comienza a mostrar síntomas de una especie de supremacismo basado en años de resentimiento hacia unos humanos que lo han dejado sistemáticamente de lado. ¿Os suena familiar? Yocasta es un personaje al que va a haber que seguir muy de cerca, porque promete un montón (y tiene algunas líneas de diálogo geniales, todo sea dicho).

Dan Slott no es de los que cambian para que todo siga igual. Ya lo demostró en la serie del trepamuros y se espera mucho de él ahora que desembarca en la casa de uno de los ‘grandes’ dentro de los Vengadores. Por el momento, este primer tomo nos permite asomarnos a una nueva colección que apunta a convertirse en una de las más esperadas cada mes en nuestras librerías.