«Toda esta realidad ha sido construida sólo para ti, hijo«

Penúltima entrega de la saga con la que Dan Slott pretende comenzar su particular revolución en las páginas de la colección del Vengador Dorado. Tras dejar caer, en el número anterior, la bomba de que el Tony Stark que llevamos viendo desde el primer número de esta colección (y unos cuantos de la de Brian Michael Bendis) no sería más que un programa precargado en el cuerpo de Tony con la última versión de la consciencia del mismo (lo que, de facto, convertiría a nuestro protagonista en un programa informático montado sobre un armazón de carne y huesos), en esta entrega el guionista comienza a poner los adoquines que marquen el camino que va a seguir la colección a partir de ahora.

Así, Tony Stark: Iron Man #6 es un número en el que Arno Stark (un personaje que llevaba en barbecho desde tiempos de Kieron Gillen) cobra especial relevancia. No tanto como villano en la sombra a las ‘órdenes’ de la principal competidora de Tony, sino como el verdadero hijo de los Stark, que contempla el final de la batalla entre Tony y Placa Madre desde una posición privilegiada y con cara de estar llegando a alguna clase de epifanía que aún está por ver si nos llevará, como bien comenta Julián M. Clemente al final de esta entrega a una nueva versión del Spider-Man Superior que ahora mismo Panini está reeditando en las páginas de Marvel Saga.

«¡No hay límites a lo que puedo construir aquí!«

Supone esta grapa también la ruptura definitiva entre Tony y sus padres adoptivos (circunstancia, al de su adopción, que no descubrimos hasta principios de esta década), pero también, en cierto modo, con su madre biológica. El Tony Stark de Dan Slott literalmente se ha hecho a sí mismo. Es su propio padre y, a la vez, su hijo y no se siente vinculado a ninguna figura paterna o materna. Como sin duda habréis sospechado, esto sólo puede conducir a algún tipo de crisis existencial de la que el alter ego de Iron Man sólo podrá salir tras revolcarse una vez más por el barro. Teniendo en cuenta la crisis a nivel global que se acaba de vivir con eScape, me parece que ya podemos comenzar a vislumbrar el abismo por el que se va a precipitar el personaje a partir del año que viene en nuestro país (una vez finalice la Guerra de los Reinos y el guionista vuelva a ser libre para escribir a placer).

Tony Stark: Iron Man #6

Sea como fuere, parece bastante claro que Slott pretende acometer una nueva historia de muerte y resurrección para Tony en la colección que lleva su nombre. Ya sea haciéndole perder todo u obligándolo a comulgar con la nueva realidad de sus orígenes creados (no engendrados, no creáis que el símil, a la inversa, con la figura de Jesucristo es baladí). Lo que me queda también bastante cristalino es que el guionista se ha preocupado de verdad en crear un universo de personajes rico y profundo alrededor del protagonista. Todos, desde Amanda a Andy pasando por Arno o Yocasta, tienen su minuto de gloria y su papel que interpretar en la ópera que está componiendo el autor. Nos encontramos ante el principio de una travesía que va a ser muy interesante de recorrer de la mano de la Casa de las Ideas (y Panini en nuestro país).