Comenzamos a escribir este artículo cuando el reloj nos marca las 3:45 de la madrugada y acabamos de regresar de la tercera jornada de la 16 Muestra Syfy de Cine Fantástico. La programación del sábado de este festival de cine siempre nos lleva a lo maratoniano (a las 12 de la mañana comenzaba la matinal, así que haced vuestras cuentas), pero hay ciertos filmes que han hecho hoy que el esfuerzo por llegar al final se nos haya antojado aún más sobrehumano. Menos mal que el día ha terminado con dos sorpresas ciertamente agradables que han compensado los sinsabores que se han podido soportar sólo por la piara de perturbados que pueblan la sala 1 de los Cines del Palacio de la Prensa en la madrileña plaza de Callao.

La Familia Addams (Barry Sonnenfeld, 1991)

El año pasado le tocó a Parque Jurásico y éste ha hecho lo propio la cinta basada en los personajes que creara Charles Addams allá por 1938 y que en este 2019 tendrán una segunda vida a manos de los tipos que perpetraron la funesta Fiesta de las Salchichas (2016). El filme no ha envejecido ni un ápice (aunque la cinta sí y la copia que se proyectó dejaba claro que, por la razón que sea, esta película sigue sin contar con versión HD, ni tan siquiera DVD, en nuestro país) y la mayor parte de sus chistes, y hay un montón, siguen siendo igual de válidos hoy como lo eran hace ya veintiocho años. Prueba de ello es que en la sesión matinal en que se ha proyectado, llena de familias con sus críos, no se ha movido una mosca más que para aplaudir las ocurrencias de Miércoles, Morticia o Fétido o para reír a carcajadas con cualquiera de las situaciones que plantea el filme. Pese a la calidad, ha sido una auténtica gozada poder ver esta película en pantalla grande tantos años después de que marcara mi infancia junto al VHS de mi salón.

La Familia Addams

Compulsión (Ángel González, 2017)

Cuando una película lleva dando vueltas desde hace año y medio y acaba en la sesión de la siesta de la Muestra Syfy, como mínimo hay que arquear las cejas en señal de sospecha. Compulsión, el debut de Ángel Gónzalez no ha defraudado y ha conseguido convertir la sala 1 del Palacio de la Prensa en una auténtica fiesta. Su discutible factura ha sido la excusa perfecta para que el público se desatara gritando y riendo a carcajadas durante toda la proyección. Un ejercicio de comedia no pretendida sobre una chica que no se fía de su pareja y acaba mal parada. Carne de Syfy en el sentido más jocoso.

Compulsión

Prospect (Christopher Caldwell y Zeek Earl, 2018)

Quizás las risotadas heredadas de Compulsión no presagiaban el mejor ambiente para Prospect, la segunda proyección vespertina. La apuesta sosegada y atmosférica de Christopher Caldwell y Zeek Earl no es para todos los públicos, menos, como decíamos, cuando el cuerpo pedía jarana. Prospect se enmarca en esta corriente de la ciencia ficción de carácter íntimo y humanista, más preocupada por el viaje emocional de sus protagonistas que del escenario fantástico en el que viven. La jovencísima Cee se ve obligada a madurar de golpe en un entorno terriblemente hostil en el que hasta el tiempo juega en su contra si quiere sobrevivir. A Sophie Thatcher (que tras algún episódico en TV logra su primer personaje protagónico) la acompaña un convincente Pedro Pascal. Sin aportar ninguna genialidad, Prospect satisfara a los buscadores de una sci-fi minimalista y reflexiva.

Prospect

Dragged Across Concrete (S. Craig Zahler, 2018)

Al llegar a la cuarta película de la tarde creíamos los syfyeros que Compulsión había sido lo más turbio del día. ¡Pobres de nosotros! S. Craig Zahler vuelve una vez más a la Muestra tras su notable Bone Tomahawk y su prescindible Brawl in Cellblock 99 para demostrarnos que ha aprendido de sus errores… Y ahora vuelve magnificándolos y llevándolos a extremos insufribles. También demuestra esta cinta hasta qué punto Mel Gibson ha dejado de saber seleccionar sus papeles y, sobre todo, el nivel de troleo de los organizadores del festival, que nos han cascado una cinta de más de dos horas y media completamente insufrible sabiendo que las presencias de Gibson y Zahler eran reclamo más que suficiente, si no por calidad, por el pitorreo que se iba a llevar el producto. Y así ha sido, tras unos minutos de cortesía (porque el público de la sala 1 es sabio y justo), se ha desatado el caos. Las siguientes dos horas y pico han sido una cadena ininterrumpida de chistes, gritos y aplausos a los momentos más absurdos que han dejado a las claras como se trata por aquí a un producto tan mediocre como éste.

Pero es que además estamos ante un filme que, pretendiendo criticar el racismo, es bastante racista y que nos ‘regala’ escenas interminables de sus protagonistas charlando sobre la vida sentados en un coche durante, aproximadamente, la mitad del metraje de la película. ‘¡Anchoas!‘, grita uno de sus personajes cuando se muestra contrariado… y la gente muere de humor.

Para lo que has quedado Mel

Nación Salvaje (Sam Levinson, 2018)

Menos mal que con la llegada de la noche a Madrid también hicieron lo propio los buenos proyectos. Assassination Nation nos ha fascinado de principio a fin, convirtiéndose (hasta la llegada de la joya que cierra este artículo) en lo mejor que habíamos en la edición de 2019 de la Muestra. Nos encontramos con una historia en la que la era de las redes sociales y la invasión de la privacidad a manos de los hackers se analizan con profundidad y se mezclan con un interesante (aunque incompleto) relato feminista que narra con realismo y crudeza la manera en que se vive y se juzga en estos días, haciendo una crítica fuerte a las actitudes anticuadas y a la hipocresía de la sociedad en la que vivimos.

¿Qué pasaría si los secretos de todo un pueblo salieran a la luz? ¿Si todos los datos de nuestros móviles, nuestros correos, nuestras cuentas e historiales de navegación estuvieran al alcance de cualquiera? La espiral de paranoia en la que se sumerge el pueblo de Salem en esta cinta (parodiando a las cazas de brujas de la antigüedad) es un fiel reflejo -aunque llevado al límite- de muchos casos que ya han tenido lugar en el mundo real. Por último, la reflexión acerca de los mensajes sobre el papel de la mujer (‘sé buena, sé fuerte, sé una puta, sé una princesa‘ se llega a decir en un momento de la cinta) que se vierten desde toda clase de fuentes a diario nos obliga a tomar consciencia de ellos y de su injusticia. La 16 Muestra Syfy está siendo una de las más comprometidas con el feminismo y no puedo decir que me parezca ni un poquito mal.

Nación Salvaje

Antes de la película se proyectó el genial cortometraje El Escarabajo al Final de la Calle, una interesantísima reflexión acerca de la vida, la muerte y cómo se afronta esta última en un pequeño pueblo cuando existe la absoluta certeza de su llegada. Muy recomendable el trabajo de Joan Vives.

One Cut of the Dead (Shin’ichirô Ueda, 2017)

Como siempre, los valientes tienen su recompensa. La madrugada del sábado nos ha regalado la propuesta más original y divertida de toda la Muestra. ¿La gran revelación de esta 16ª edición? Aún nos queda toda una jornada por delante, pero tiene muchas papeletas. Shin’ichirô Ueda nos propone una revisión del cine de zombies a partir del rodaje de una película sobre zombies interrumpido de forma abrupta por un ataque de… sí, ¡de zombies! Un loquísimo giro que a los más cinéfilos les evocará a cierto filme de Peter Bogdanovich con Michael Cane de protagonista convierte a este título en una alocada y honesta carta de amor al séptimo arte. No queremos profundizar mucho más para recomendaros que, si tenéis la posibilidad, os lancéis sin dudarlo a One cut of the dead y entréis en su juego.

One Cut of the Dead