«Quieres sentir las sombras de la ciudad al envolverte«
Hace poco tuve la oportunidad de viajar a Londres y visitar alguna de sus tiendas de cómics más importantes. Allí, junto a los cómics de Batman y Spiderman y junto a las toneladas métricas de manga y merchandising, pude disfrutar de la bien abastecida parte dedicada a los libros de ilustración. Tanto a las guías y manuales como a los álbumes recopilatorios propiamente dichos. ¿Es algo que no se puede encontrar en nuestro país? Tampoco diría tanto (y el presente volumen es buena prueba de ello), pero sí que es cierto que esta clase de publicaciones son las primeras que se descartan cuando uno se enfrenta a un catálogo menguante en su tienda de referencia. Sin embargo, y aunque los cómics originales siempre estarán ahí, esos álbumes son una herramienta de lujo para los ilustradores (nuevos y experimentados) que buscan nuevas inspiraciones o sencillamente ampliar sus conocimientos y técnicas.
Lo sé, estoy casado con una ilustradora. Y de cuando en cuando, los regalos que de verdad hacen que se iluminen los ojos (aparte de los tés de sabores imaginativos y las noches de hotel con buffet de desayuno) son estas publicaciones. En nuestra casa hay una estantería especial dedicada a los libros de ilustración y hasta para alguien como yo, que no pasó del estilo artístico de preescolar, su lectura y la contemplación de sus ilustraciones siempre resultan interesantes. Resulta muy potente descubrir cómo un artista determinado mantiene su estilo sin importar la clase de encargo que esté realizando y pasearse por las cabezas de algunos de los ilustradores más llamativos del mundo a través de las obras que suelen ofrecer en esta clase de publicaciones. También, y de ello os podría hablar mejor quien más sabe de nosotros dos, resulta muy educativo encontrarse con una descripción detallada a delas técnicas que se usan para realizar tal o cual parte de una ilustración.
«¿Por qué seguir haciéndoles preguntas que nunca tendrán respuesta?«
Batman: Querido Detective reúne varias de las portadas que ha venido haciendo a lo largo de los últimos años Lee Bermejo. El artista es un mago de la ilustración realista y brutal. Su Batman está lleno de heridas abiertas y cicatrices de anteriores batallas y sus villanos infunden verdadero terror. El álbum, de apenas sesenta y cuatro páginas (como los especiales que está editando ECC sobre Batman: Un Mal Día) estructura las imágenes en torno a una ‘historia’ ambigua que las medio-enlaza y que sirve para mantener un hilo conductor tenue a la par que vamos disfrutando con el transcurrir de las páginas y las imágenes.
ECC pone en nuestras manos un libro de ilustraciones de Lee Bermejo que se disfruta tanto desde el plano profesional como desde el del amante de los cómics. Por algo más de doce euros tenéis la oportunidad de subir el caché de vuestra librería de casa con un libro que exige que lo volvamos a revisitar una y otra vez en busca de detalles que se nos hubieran podido pasar e inspiraciones que nos lleven a crear las ilustraciones que en un futuro puedan formar parte de una publicación como ésta.
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