Lo que parecía que iba a tratarse de una recopilación del Flash de los nuevos 52 en formato cartoné ha terminado siendo una casi completa recopilación de la etapa de Francis Manapul y Brian Buccellato al frente de las aventuras de Barry Allen. Digo «casi completa» porque para Flash: Reverso, el tomo que conluye esta fase, ECC Ediciones ha obviado incluir los últimos capítulos escritos por Buccellato, pero es relativamente fácil hacerse con ellos, pues están recogidos en Flash #8.

Aún así, esta acotación, no ya dejando fuera de la reedición más de dos años de colección (la etapa completa de Robert Venditti), sino el final de la etapa de Buccellato como guionista, dejando importantes interrogantes en el aire (como la identidad de Kid Flash o la resolución de la obsesión de Barry por la muerte de su madre) plantea la cuestión (de cara a las recopilaciones) de cuándo hay que dar por cerrada una etapa en las series regulares, más aún cuando no siempre hay una línea clara que las separe.

Con la Wonder Woman de Brian Azzarello, por ejemplo, no hubo problema, pues al despedirse cerró su historia y los Finch comenzaron la suya en un punto sin deudas con lo anterior. En Marvel las Patrullas-X de Kieron Gillen y Matt Fraction siguieron una línea tremendamente continuista (algo que se respetó en la recopilación Deluxe), mientras que Lobezno y la Patrulla-X de Jason Aaron también lo dejó todo bien empaquetado para que su tocayo Latour siguiera su propio camino.

El Flash de nu52 estaría en un punto intermedio. Si bien la etapa Manapul-Buccellato puede disfrutarse más o menos de forma independiente (teniendo en cuenta que quedarán algunas relevantes preguntas sin solución), la guionizada por Venditti depende mucho de la primera. Ante esto, la decisión de ECC ha sido la comentada antes, cortar a la mitad, dando por cerrada la publicación y saltar directamente a la recopilación de Joshua Williamson a partir del Renacimiento deceíta. Si queréis completar el hueco, debéis haceros con los tomitos Flash #8-14, porque parece difícil que esta recopilación vaya más allá.

Sobre lo que nos encontramos en este último volumen de la reedición, todo gira en torno a Flash Reverso, como era de esperar por el título. La pareja creativa, además de abrir las citadas cuestiones de antes, busca dar carpetazo a la situación anómala que se había producido al inicio de la serie (situación similar a la que exploraría luego Williamson en el contexto de Renacimiento, todo hay que decirlo) con la que varios ciudadanos anónimos obtuvieron poderes de la fuerza de la velocidad. Para ello dan una vuelta de tuerca a lo que pudieramos conocer de Flash Reverso, dándole un cariz tan trágico como el de la versión concebida por Geoff Johns unos años antes, aunque luego el desarrollo del personaje no alcance las cotas de aquel. Por algo la etapa de Johns es tan estimada. Aún así, supone una revisión fresca e interesante de algunos conceptos clásicos del velocista escarlata y que «cierra» una etapa altamente disfrutable y accesible para todo tipo de lectores.