«¿Cómo de justo te parece eso para los que lo perdieron todo?«

Vita Ayala condensa en estos cuatro primeros números el primer arco de la serie en solitario de Livewire y, con ello, nos da a los lectores exactamente lo que esperábamos: Contexto (unos Estados Unidos sacudidos por la tragedia de las miles de víctimas que provocaron las Harbinger Wars 2) y Consecuencias. El primero tendremos ocasión de ir degustándolo con más calma conforme avance la trama de la serie, pero era muy interesante ver qué hacía la autora con el segundo. La psiot que casi destruye la nación más poderosa de la Tierra no podía irse de rositas tras todo el caos creado y en estos números Ayala se encarga de castigarla físicamente (de maneras muy explícitas primero y algo más insidiosas después) y, más importante aún, anímicamente, al hacerla consciente de todo el dolor que ha causado tanto a los humanos corrientes como a sus congéneres, ahora perseguidos con más rabia y miedo que cuando se desató la guerra.

Prepara así el camino la autora para la que va a ser una serie sobre la redención de un personaje en constante lucha consigo misma por mantener el control y no ceder a la tentación de manipular un mundo que no sólo no la acepta, sino que ahora le da caza como la terrorista fugada en la que se ha convertido tras ‘apagar’ a toda la nación. Para ello la guionista trae del pasado a un personaje que pueda herirla emocionalmente y le dota de un arma que hace más daño a la antigua heroína que cualquier cuchillo: los recuerdos de cada uno de los fallos cometidos y las consecuencias de los mismos sobre las personas a las que quiere.

«Me equivoqué en lo que hice, ahora lo sé«

Puede parecer una tontería, pero los recuerdos pueden ser un arma poderosa. La nostalgia y los buenos recuerdos nos ponen difícil tomar ciertas decisiones que implican cortar con el pasado y los malos recuerdos nos obstaculizan decidir sobre los cambios que tenemos que hacer para dirigir nuestro futuro. Vivir anclado en los recuerdos es una de las situaciones más tóxicas y atenazantes que conozco. Los remordimientos por las malas decisiones pueden sacudirte como un mazo y los traumas (que no son más que malos recuerdos enquistados en nuestro subconsciente) nos incapacitan para disfrutar plenamente de la vida. Ayala lanza contra Livewire a una auténtica bomba para obligarla a replantearse la vida, sus decisiones y qué es lo que va a hacer a continuación. Lo positivo de todo esto es que la protagonista no se deja atrapar por los recuerdos, sino que se apoya en ellos parea ser la protagonista de su propia evolución.

Livewire #4

La manera en que nuestra protagonista supera el ‘impedimento’ que le ha sido implantado no es lo que más valoro de este cómic (por decirlo de alguna manera), pero la verdadera historia no está en la superación de este problema, sino en la admisión de los terribles errores que la protagonista cometió en el pasado reciente y en su voluntad para redimirse y pagar por ellos salvando tantas vidas como vidas fueron tomadas durante su arranque de furia cibernética. Vita Ayala ha creado a su propio Magneto en Valiant y va a ser una auténtica delicia seguirlo de cerca desde las páginas de los cómics de Medusa.