Pues el gran misterio de la etapa de Nick Spencer como arquitecto de las aventuras de Spiderman por fin está resuelto. Al menos el quién, pero todavía nos falta el cómo. Esperemos que este segundo interrogante sea más sorpresivo que el primero, pues desde el número #12 de la actual numeración el guionista nos dijo sin decirnos de quién se trataba.

«Quiero que todo esté perfecto. En su sitio justo«

Aún así, el conocer de quién se trata abre un interesante abanico de opciones que el escritor parece querer tratar, profundizando más en figuras como Norman Osborn y quién sabe si retomando algunos flecos que quedaban sin rematar desde tiempos de Straczynski (y Quesada). ¡Ojo! Queda mucha saga por delante y está por ver si estas predicciones se cumplen o no.

Panini Cómics edita esta etapa de las aventuras de Spiderman en formato grapa quincenal, incluyendo dos aventuras: Restos mortales y Orden caída, las cuales vendrían a ser dos perspectivas de la misma historia. La primera está centrada por completo en el duelo entre Peter y Pariente y la segunda aborda todos los efectos colaterales del mismo, desde la renovada misión de Comepecados, a la alianza forzosa de Doctor Extraño con otro personaje afín a Spiderman, o la conversión de Norman Osborn.

Restos mortales hace las veces de arco principal. Lo que aquí acontece es consecuencia de lo que venimos leyendo hasta ahora. Los planes de Spencer al comienzo de su segundo año como guionista arácnido confluyen en estas páginas. Resuelto el enfrentamiento contra Comepecados, Pariente sale por fin a la luz con la intención de hurgar en los traumas de Peter (que no son pocos) y utilizarlos para hacerle daño. Orden caída, por su parte, complementa la aventura principal dando espacio a todas aquellas tramas y personajes que, por espacio, no tienen cabida en Restos mortales. Vendría a funcionar como un tie-in, aportando contexto e información de interés.

Spencer sigue tirando de nostalgia y los lectores más veteranos encontrarán referencias aquí y allá a aventuras más clásicas (Julián Clemente en sus spot on da cuenta de ellas), pero de momento sabe mantener el foco de tal manera que los guiños no distraen y parece tener una dirección clara, con menos volantazos de los que nos tiene acostumbrados. Otra cosa es que el devenir de esta saga nos guste más o menos, pero de momento apunta maneras.