Gata Negra: Red oscura

Gata Negra. Red Oscura: Team-Up infernal

No hemos tenido que esperar mucho para reencontrarnos con Felicia después de la muy disfrutona La gata de hierro. Jed MacKay vuelve a las andadas y retoma a la que se está postulando a convertirse en su personaje fetiche dentro de Marvel Comics. Junto a una inspirada Mary Jane, Felicia Hardy tiene que lidiar ahora nada menos que con Red Oscura, evento arácnido que nos devuelve a los modos del Inferno mutante.

 

«Si pudiera darles pudding, estos tíos me convertirían en su reina«

 

Panini Cómics recoge esta miniserie dentro de la cabecera de Gata Negra (lo que haría ya una colección de siete tomos) y añade además un pequeño y divertido número (en el que también aparece MJ) con un botín imposible de robar.

 

Gata Negra: Red oscura

 

¿No habéis leído Red Oscura? No os preocupéis. MacKay aborda el evento de forma tangencial. Aquí no vais a encontrar ni arañas, ni mutantes. Solo una gata y muchos demonios. Es cierto, sin embargo, que parte del contexto de la serie regular del Asombroso Spiderman está muy presente. Felicia y MJ tienen un pasado en común y el triangulo que suelen formar ambas con Peter Parker ha estado bastante activo desde el final de Beyond. Así pues, si venís de nuevas, es posible que ciertas situaciones y alusiones os pillen con el pie cambiado.

 

Al margen de eso, MacKay ofrece de nuevo una historia súper disfrutable y que más allá de sus escenarios increíbles, funcionan por su asombrosa simplicidad. La pregunta es ¿qué hay que robar? Da igual si entran en liza las gemas del infinito, Iron Man con todos sus cachivaches hipertecnificados o el mismísimo reino del Limbo; cuando la Gata Negra entra en acción, el juego está claro. Cuando uno lee o escucha los nombres de Danny Ocean, Arsène Lupin o incluso el del inspector Clouseau ya sabe -o puede hacerse una idea- del tipo de aventura que le espera. Lo mismo sucede con Felicia Hardy.

 

El reto, la sorpresa de sus historias consiste precisamente en lo complicado o descabellado que pueda resultar el robo. Es más, muchas veces el qué se roba no pasa de ser un simple mcguffin y el atractivo de la historia está en el cómo. En Red Oscura nuestras protagonistas deben hacerse con una espada-alma, pero como si tuvieran que hacerse con cualquier otro objeto de poder infernal. Haced el ejercicio de imaginar otro botín y veréis que la historia funciona exactamente igual.

 

La clave de Red Oscura está no solo en el viaje de nuestras protagonistas (lleno de peligros), sino también en el trabajo del autor en la relación entre ambas heroínas; es decir: la aventura y sus personajes. Una de las grandes ventajas con las que cuenta Felicia como personaje es que sus aventuras están tan acotadas a las formas de la ficción criminal y muchas veces el desarrollo de las tramas está plagado de mecanismos automáticos (consciente de los mismos, en el tercer capítulo la Gata verbaliza uno de ellos), que el margen para trabajar otros aspectos de la narración es mucho mayor -y más agradecido. Cuando se conocen los códigos y reglas es mucho más fácil jugar con ellas y -si se quiere- saltárselas. Felicia Hardy (y Jed MacKay) lo sabe muy bien.

Acerca de Daniel Lobato

Avatar de Daniel Lobato

El padre de todos, pero como a Odín, se me suben constantemente a las barbas. Periodista de vocación cinéfila empecé en deportes (que tiene mucho de película) y ahora dejo semillitas en distintos medios online hablando de cine y cómics. También foteo de cuando en cuando y preparo proyectos audiovisuales.

Deja un comentario:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos relacionados