Superado el escollo de rememorar el argumento del videojuego, el Gamerverse de Spiderman que publica Panini Cómics se enfrenta a la hora de la verdad, ha de demostrar que tiene la capacidad de generar sus propias historias que puede volar sin la protección de un referente al que agarrarse.

«No hay nada como un poco de ingeniería genética de salón«

Dennis Hopeless, que continúa al frente de las aventuras de este Spiderman, asume el reto con una trama continusta con lo visto en el videojuego del que procede, pero expandiendo el mismo con nuevos y viejos personajes del entorno arácnido. El autor explora la vertiente científica del personaje, que para la ocasión se ha creado una armadura (que quienes conocéis el juego ya la habréis visto entre los trajes alternativos disponibles) con la que ser más eficaz ante cierto tipo de enemigos, pero -como es de esperar- no es suficiente ante una misteriosa amenaza, llevándole a trabajar en nuevas modificaciones para obtener súper velocidad. De ahí el nombre de la aventura: Velocity.

No vamos más allá para no contar nada del argumento que no podáis deducir de las portadas, pero resulta muy gratificante ver como el guionista combina elementos característicos característicos del videojuego, con otros completamente nuevos y otros tantos del mundo de las viñetas como Ben Urich o un irreconocible Quentin Beck. Evidentemente, al tratarse de un producto licenciado que ha de estar en consonancia con el imaginario del videojuego (al menos de momento), no podemos esperar un argumento que vaya más allá de la simple anécdota en comparación con las grandes sagas que podemos leer, por ejemplo, en El Asombroso Spiderman. Pero aún con esas limitaciones, Hopeless encuentra el espacio suficiente en el que trazar un rumbo para sus personajes y ofrecerles una interesante evolución, sobre todo a Mary Jane, que en su rol de periodista poco tiene que enviar a la reportera más famosa de la distinguida competencia.

El relato abordado po Dennis Hopeless finalizará en su próxima entrega (dando paso a la tercera miniserie de la colección, con Felicia Hardy en un rol principal) y a falta de conocer su conclusión, podemos darnos por satisfechos con el rumbo que parece tomar este rinconcito del multiverso Marvel.