Con la segunda y tercera entrega de La conspiración del clon nos acercamos al ecuador de una de las aventuras más apasionantes que ha escrito Dan Slott en los últimos tiempos para nuestro amistoso vecino arácnido. Para ello el guionista no ha dudado en acudir a otro de sus más recientes hits, Universo Spiderman. Slott no solo le da a Kaine Parker otra ocasión para lucirse después de una última etapa cargada de tragedia, sino que vuelve por algunos de los conceptos y escenarios que imaginara para aquel evento arácnido.

Volvemos, pues, a jugar con el multiverso y las diferentes versiones de nuestro protagonista. En estos dos cuadernos que nos ocupan, Dan Slott se afana por sorprender al lector, coqueteando con alguno de esos elementos «intocables» de la mitología arácnida, elementos malditos, de los que quedaron guardados en un cajón para no volver a abrirse nunca más. Slott ya ha demostrado sobradamente que le gustan los retos y que con él –como en su momento con Straczynski– no hay nada sagrado. Cualquier cosa puede pasar con él al mando.

La conspiración del clon mantiene en estos momentos una doble vía de acción. Por un lado tenemos a Peter intentando descubrir los planes ocultos del Chacal. El trepamuros no se fía de su viejo rival y motivos no le faltan, pues no hace más que resucitar a antiguos enemigos y aliados para sumarlos a su causa. Spiderman debe luchar contra toda una galería de villanos, pero también contra sus propias convicciones cuando no para de recibir señales de que quizás las cosas no son como el cree, que entre los blancos y los negros hay toda una paleta de grises. Por otro lado, nos encontramos con Kaine y unos aliados que nos resultarán de sobra conocidos lluchando por descubrir como frenar los «efectos secundarios» y las consecuencias a medio plazo de la ambiciosa empresa del Chacal. Una carrera que les lleva por diferentes universos en busca de respuestas, pero, como siempre, todo les terminará conduciendo a Tierra Primordial.

Slott lleva a cabo una aventura con un ritmo trepidante, pero no deja de lado el factor humano de la historia, poniendo a muchos de los personajes ante complicados dilemas. No solo al propio Peter, sino a personajes como J.J. Jameson, que viene de sufrir una terrible pérdida. Las implicaciones del plan de Chacal son enormes, y vienen con la promesa de revolucionar el mundo. Uno de los personajes más cconscientes de todo ello es Merodeador, pues de hecho ha experimentado en sus propias carnes dicho plan. Tanto en la trama central como en su serie regular (cuyos episodios se incluyen en los presentes volúmenes), los diferentes guionistas le prestan mucha atención a su visión de los acontecimientos.

Pero el guionista tiene guardados muchos ases en la manga y en estos El Asombroso Spiderman #125-126 da buena cuenta de ellos. Uno de ellos es la presentación de la nueva Electro, mucho más violenta y despiadada que su predecesor, sin la carga de la continuidad a su espalda. Este envalentonamiento de algunos personajes se traslada a la propia historia, que a partir de determinado giro (ya lo comentaremos en la próxima reseña), se vuelve mucho más retorcida y perversa. Propone un juego peligroso para el lector veterano, haciendo un ejercicio de retrocontinuidad que promete poner las cosas patas arriba a partir de ahora.

Además de los capítulos dedicados al evento y los relacionados con Prowler y The Amazing Spider-Man, estos tomos recogen también las grapas correspondientes a la serie en solitario de Seda, con mucho que decir en esta aventura, principalmente por su vinculación con J.J. Jameson. La curiosidad mató al gato y a Cincy Moon la pone en serios aprietos en estas páginas.

Veremos como continúa esta aventura.