«Siempre he ODIADO esta estrella«

El Guantelete del Infinito se comienza a asentar tras las sorpresas iniciales del primer número. La llegada de Eve cierra el grupo de personajes centrales de la obra y les coloca las máscaras que todos esperábamos de cara al baile que se avecina en los próximos números de la (breve) colección. Gerry Duggan ha querido dar a esta miniserie un interesante toque familiar distinto al que ha ido vertiendo durante los últimos meses en Nova. En El Guantelete del Infinito partimos de una igualdad de posiciones al hablar de una familia superpoderosa (¿hola, Cuatro Fantásticos?) y su superpoderoso perro en lo que parecen los últimos días de la Tierra… o al menos del territorio del Mundo de Batalla en el que se encuentran.

Y entre medias, como ya dijimos el mes pasado, vuelven las Gemas del Infinito. Dichos seis artefactos poderosos, contemplamos que se dividen en esta ocasión entre uno de los cuatro integrantes de la familia (con toda probabilidad Anwen, una cría que igual habría que conservar en el universo post-Secret Wars) y Thanos. Al menos en una visión de futuro que nos muestra a ambos como portadores de cuatro de las gemas y en una batalla final por el control de las que están en posesión del otro. Dado el extraordinario poder de estos artefactos, no hay muchas dudas acerca de para qué lo querría uno de ellos, pero ¿y el otro? ¿Y permitiría Muerte la existencia de un poder capaz de rivalizar con el suyo en el Mundo de Batalla?

«Tengo que dejar de dudar de ese perro«

A quienes también descubrimos de pronto en la colección son los Gamora y Starlord de esta realidad, unos personajes un tanto más amorales y, merced a una matanza, también unos de los portadores de estos brillantes objetos de deseo. Duggan, que ya había recurrido a la asesina y a Cohete para entrenar a Nova en su propia serie, no puede resistirse a usar a unos de los personajes más de moda en el Universo Marvel para darle más ímpetu a la historia.

El Guantelete del Infinito #2

Con todo, la historia necesita comenzar a desarrollarse para el próximo número para evitar el riesgo de incurrir en un final abrupto por haber desarrollado demasiado la introducción. Sobre si será o no capaz el guionista de ajustarse a este ritmo lo descubriremos este mismo mes en nuestras librerías. Por el momento El Guantelete del Infinito es una miniserie con muchas más preguntas que respuestas.