«Me encanta echarme unas risas«

Resulta complicado recomendar la lectura de un cómic cuando sabes a ciencia cierta que su autor, uno de los guionistas de mayor peso específico en la Marvel de los últimos diez o quince años (que se dice pronto), se marchará dentro de poco a la editorial que ejerce como competencia directa de la Casa de las Ideas en Estados Unidos. Así es, después de reventar el statu quo de Marvel con su para siempre recordado Vengadores Desunidos, después de crear el concepto de Vengadores y Nuevos Vengadores, tras crear a Jessica Jones y reivindicar la figura de Luke Cage, Brian Michael Bendis abandona el barco en busca de nuevas aventuras en compañía de nuevos compañeros.

Desde aquí le deseamos la mejor de las suertes a un autor que se ha ganado tantos fervientes seguidores como enemigos acérrimos y, al menos un servidor, recomienda esta serie como una de las mejores maneras de despedir a un guionista al que estos personajes tocan muy de cerca. Más aún, este primer número cubre con solvencia las carencias que demostró la reciente serie de Netflix y aprovecha las múltiples sinergias que ofrecen sus cuatro personajes principales, más de moda que nuca por la citada plataforma de series online.

«El control es una ilusión«

Precisamente, si os gustó la versión televisiva os va a encantar el cómic y si sentistéis que a la ficción le faltaba algo, aquí tenéis un producto redondo que está preparado para ser disfrutado al momento. Los ocho capítulos de este pasado mes de agosto pecaron de ser demasiado dependientes de la serie de Puño de Hierro, de lejos la más floja de las que Netflix ha estrenado hasta el momento. Bendis reúne a los personajes bajo una bandera mucho más creíble e interesante, la que podríamos decir que se desprende de la serie de Luke Cage. El primer número al completo desprende un fuerte aroma a la serie producida por Cheo Hodari Coker, la trama, el villano, los clubes… tienen ese olor característico a lo callejero que tan bien se plasmó en la ficción protagonizada por Mike Colter.

Los Defensores #1

El gran beneficiado de pasar por el taller de chapa y pintura de Bendis es Puño de Hierro. Liberado del aura de novato y de niño malcriado que nos dejaba al ser interpretado por Finn Jones, el personaje vuelve a convertirse en el gran amigo y aliado de Cage, uno de los personajes fetiche de Bendis. El resto de personajes aguantarían bien un cara a cara con sus versiones de carne y hueso (si acaso Daredevil es menos retraído en esta colección) y permiten a los fans seguir disfrutando de las aventuras de esta pandilla mientras aguardan al regreso de la serie.

Poco más se puede decir. Esta nueva iteración de Los Defensores nace con los pies en la tierra y con una serie de ideas muy claras acerca de qué clase de cosas se van a permitir y cuáles no, tanto ahora como en un futuro próximo. Los lectores, al margen de lo que suceda con el escritor, estamos de enhorabuena: la Marvel que miraba a las estrellas no se ha olvidado de los muchos humanos preocupados por el día a día y los retos que han de superar para seguir adelante.