Finalizado X de Espadas, se abre un nuevo ciclo para Krakoa y para el mundo. Y para la galaxia. Y hasta el universo. Vale, igual nos hemos emocionado un poco… o no. Reinado de X (cuyo primer volumen de Panini Cómics incluye SWORD #1, X-Men #16, X-Factor #5 y Hellions #7-8) mira en su arranque directamente hacia las estrellas.

«Bienvenido a la Estación Uno de SWORD«

Este primer volumen tiene un marcado carácter introductorio, aunque también de epílogo del citado evento. Por una parte tenemos series como SWORD que echan a andar y otras, como Infernales, dedicadas a explorar las consecuencias de la batalla de Otromundo.

Empezando por estas últimas, las malas artes de Siniestro (recordemos que le costó la vida a todo su equipo) van a llevarle por el camino de la cordura. Si el grupo que lidera ya era inestable sin que él hiciera nada, después de su traición, la situación se ha vuelto mucho más tensa. Hay que sumarle, además, que dos de sus acólitos murieron en Amenth, lo que resulta en unas variables no tan drásticas como las de fallecer en Otromundo (ahí la mente que resucitaba era un collage de diferentes versiones de uno mismo), pero igual de imprevisibles.

Patrulla-X #17: Reinado de X

Si queríamos picante, Zeb Wells nos sirve ración doble, porque posiciona a Kaos en una posición de confrontación contra Siniestro frente al resto del grupo y revela, por fin, cuáles son los motivos por los que Mariposa Mental se muestra tan leal ante el sibilino villano (en Krakoa sigue habiendo gente que no sabe o quiere aprovechar la oportunidad de empezar de cero). Y el motivo es de lo más sorprendente. ¿Consejo? Recuperad los primeros tomos de Amanecer de X. Todo está conectado.

En cuanto a SWORD, la gran adición al cosmos mutante de este arranque de Reinado de X, supone la confirmación de Krakoa como potencia no solo de La Tierra, sino del universo Marvel. Los mutantes se han dado cuenta de que su potencial va mucho más allá de lo que cualquiera podría haber previsto y miran a las estrellas como nueva frontera a conquistar. Siempre con la bandera de la convivencia con los humanos como objetivo primordial, ven en el espacio el terreno perfecto para expandir su poder sin confrontar con sus vecinos. O eso creen, que ya sabemos cómo se tuercen las cosas en menos de lo que dura un suspiro.

Sea como fuere, Abigail Brand se suma a la causa para comandar una nueva estación espacial, pero bajo sus propias condiciones, erigiéndose como una igual ante Magneto y el resto de Consejo Silencioso. Al Ewing, guionista de la cabecera, promete aventuras al más puro estilo Ultimates y una buena dosis de política y tramas palaciegas.

S.W.O.R.D. #1

Aunque para política, la que tiene que conducir Jonathan Hickman en Patrulla-X. Aquí los krakoanos tienen entre manos un problema mayúsculo. ¿Cómo gestionas la aparición, de la noche a la mañana, de miles de una nueva isla habitada por miles de mutantes? La victoria en X de Espadas propició que Arakko y sus habitantes retornaran a La Tierra para unirse a la nación krakoana. Y lo que sobre el papel parecía un final idílico -especialmente para Apocalipsis, quien había dedicado su vida a ello-, resulta en un montón de contratiempos e imprevistos que van a impedir que Cifra disfrute de su merecida luna de miel.

Y finalmente tenemos X-Factor, que explora las consecuencias de las resurrecciones corruptas de Otromundo y afronta un nuevo misterio. Tras su visita al mojoverso, parece claro que la serie de Leah Williams y de David Baldeón va a gozar de cierta independencia respecto al resto de cabeceras, siempre y cuando las circunstancias lo permitan.