A partir de la novela Vineland de Thomas Pynchon, el cineasta Paul Thomas Anderson disecciona el estado actual de la sociedad norteamericana en clave de sátira política. El centro dramático es la carrera de un padre por salvar a su hija de los pecados de un pasado que creía haber dejado atrás. Alrededor de este concepto tan primario con el que cualquiera puede identificarse -ahí una de las claves del filme, la facilidad que tiene para conectar con los espectadores a través de tropos, estructuras y temas populares-, construye un relato que señala directamente al neofascismo que impregna a la actual administración estadounidense confrontándolo con un ficticio movimiento revolucionario (deudor de grupos beligerantes entre los 60 y 70 como Organización Comunista 19 de mayo), que acusa los males de la izquierda combativa (radical o moderada).
Western, thriller de acción, comedia con vibras de los hermanos Coen… Una batalla tras otra combina géneros y tonos para ofrecer un blockbuster de autor que toma la temperatura de los tiempos actuales con peligrosa precisión.
Sinopsis: Bob, el ya acabado revolucionario (Leonardo DiCaprio) existe en un estado de paranoia y drogado. Sobrevive desconectado de los demás con Wilma, su enérgica y auto-suficiente hija (Chase Infiniti). Cuando su malvado archienemigo (Sean Penn) reaparece al cabo de 16 años y ella desaparece, el ex radical lucha para encontrarla. Tanto la hija como el padre tienen que luchar contra las consecuencias del pasado de éste.
Una batalla tras otra está protagonizada por Leonardo DiCaprio, Sean Penn, Benicio Del Toro, Regina Hall, Teyana Taylor y Chase Infiniti.
Podéis seguir a Adry Hilton, quien nos ha acompañado en el vídeo en el que analizamos la película, a través de la web La cabecita y sus redes sociales:

Deja un comentario: