Batman: La dinastía del Caballero Oscuro

Batman. La dinastia del Caballero Oscuro: Cuesta abajo y sin frenos

Batman: La dinastía del Caballero OscuroHay que ver. La línea Otros Mundos no deja de sorprendernos. Obras magnas como Kingdom Come, entretenimientos muy estimables como Thrillkiller o aventuras olvidables como La isla del doctor Moreau dan cuenta de lo ecléctico y desnivelado de una línea en la que muchas veces parece primar más la originalidad de los conceptos que la calidad de las historias. Batman: La dinastía del Caballero Oscuro se sitúa en este grupo de relatos con poderosos planteamientos y pobres desarrollos. Hay que agradecer, eso sí, que ECC Ediciones se lance a publicar todas estas obras, estupendas adquisiciones para coleccionistas y completistas.

 

«¡Me has perdonado la vida porque sientes curiosidad!«

 

Mike W. Barr concibe una historia que lleva por diferentes marcos temporales, uno por cada capítulo. Empezamos en la época de las Cruzadas, viajamos luego al presente gothamita y concluimos en un futuro lejano. Siglos de diferencia entre unas épocas y otras con dos elementos en común: el murciélago y Vandal Savage. De todas ellas la más interesante, la más atractiva en cuanto a ofrecer una vuelta de tuerca a la iconografía del personaje y someterla a cambios radicales es la aventura que acontece en el «pasado oscuro». De hecho no estamos ni siquiera ante Bruce Wayne o un sosias, sino ante un caballero templario cuyo emblema familiar es el murciélago. Como relato de espada y brujería de corte oscuro -y hasta terrorífico en algún pasaje- es verdaderamente estimulante, tanto en lo referente al guion, como al arte.

 

Ya flojea un poco en el salto al presente, donde se busca, de forma un tanto forzada, la conexión del templario con los Wayne. Las divergencias que presenta respecto a la continuidad oficial de Batman responden también al capricho del guionista, pero aún así la trama nos reserva alguna divertida sorpresa que invita a seguir leyendo hasta el final. Pero una vez que la propuesta ha empezado a desinflarse, es imposible remontar el vuelo y la caída es inevitable. El tercer y último capítulo, el «futuro oscuro» sigue en la senda de la gratuidad, llevándola hasta el extremo de presentar una Gotham post-apocalíptica dividida en dos mitades (una para ricos y otra para pobres) en la que chimpancés y humanos viven como iguales.

 

Batman: La dinastía del Caballero Oscuro

 

Batman: La dinastia del Caballero Oscuro es una lectura prescindible, de la que solo merece la pena el primer capítulo (que puede leerse como una historia independiente) y que más allá de su valor como curiosidad para completistas del Cruzado Enmascarado, poco va a aportar a nuestras vidas.

Acerca de Daniel Lobato

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El padre de todos, pero como a Odín, se me suben constantemente a las barbas. Periodista de vocación cinéfila empecé en deportes (que tiene mucho de película) y ahora dejo semillitas en distintos medios online hablando de cine y cómics. También foteo de cuando en cuando y preparo proyectos audiovisuales.

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