«Soy el viento que agita los postigos«
John Constantine y la Liga de la Justicia Oscura han sido un todo durante tantos números que, aunque el mago británico abandonó (fue expulsado) la formación una vez superados los últimos coletazos de Maldad Eterna, su presencia en la serie ha seguido siendo una constante hasta la presente entrega. Es por ello que hacía falta una historia que cortara definitivamente el cordón umbilical que unía al inglés con el resto de ‘bichos raros’ del equipo para que, por una parte, John pudiera volver a protagonizar historias en solitario y, por la otra, la LJO tuviera la ocasión de demostrar que puede volar libre bajo la tutela de Zatanna con tanta eficacia como lo ha hecho hasta ahora bajo el liderazgo del embaucador por antonomasia.
Así, aunque Liga de la Justicia Oscura #10 trate únicamente de la primera parte de una nueva saga dentro de la colección, podemos dividir el tomo en dos partes bien diferenciadas. La primera de ellas (el segundo Annual de la colección) se dedica a volver a juntar a todos los integrantes pasados y presentes del equipo de una manera (a mi parecer) un tanto rebuscada y sosa, para enfrentarlos en una suerte de batalla que acaba por disolver el pegamento que unía a varios de los integrantes del grupo de una manera tan efectiva que la segunda parte del álbum trata básicamente acerca de la desunión y de cómo ésta les muestra a algunos el sentimiento de apego que han ido desarrollando a lo largo del tiempo por los demás mientras que a otros los mantiene distantes y aislados.
«¿Vas a intentar devorarnos otra vez?«
Es mucho más interesante esta segunda parte del cómic ya que nos presenta a los personajes que conocemos en un variado conjunto de escenarios que les obligan a pararse y reflexionar, en algún caso, o a tomar una parte mucho más activa en la gestión del grupo de antihéroes que conforman la Liga.
De este modo, observamos a Zatanna siendo arrastrada de nuevo a un momento en la historia en el que el límite a sus poderes reside en su propia imaginación. Esto da lugar a una curiosa matrioska narrativa en la que nada es lo que parece y en la que la maga ha de apelar a todo sus sentido común para poder volver con sus compañeros. Por su lado, la Enfermera de Pesadilla es arrojada a la otra cara de la moneda (un mundo yermo y agonizante) en compañía de los tres monstruos de la LJO: Frankenstein, la Cosa del Pantano y el ya casi olvidado (para mi desgracia) Andrew Bennett. Esta es una buena ocasión para que este interesante personaje nos venda sus armas a la hora de ejercer como líder pero, por desgracia, queda eclipsada por el retorno de un villano que no esperábamos y que se convierte en el verdadero salvador de la trama.
En octubre se publicó el último número de la colección (que reseñaremos pronto). Es de suponer que no sólo la serie, sino también esta saga y el destino de cada personaje, quedarán sellados a partir de entonces, pero la firme intención de Warner de sacar adelante la película acerca del grupo me hace pensar que no habremos de esperar mucho antes de volver a ver a Zatanna y los suyos dando guerra a la parte mística del universo DC.
Deja un comentario: