«Sólo son animales hambrientos que quieren llenarse la tripa«
Pasen. Pasen y vean una de las series que está llamada a convertirse en una de las más importantes de la nueva etapa que ha emprendido Marvel en 2016. Doctor Extraño vuelve a despertar en los lectores las sensaciones que ya nos produjeran en 2012 Jason Aaron y Chris Bachalo con su Lobezno y la Patrulla-X. Se trata de una serie divertida y rápida de leer, pero a la vez repleta de contenido del que te obliga a repasar una y otra vez cada cómic leído en busca de detalles y pistas que te indiquen hacia dónde rayos pretende dirigirse la pareja creativa. La Casa de las Ideas, de cara a este Nuevo y Diferente Universo Marvel, ha recapacitado y nos ha plantado algunas parejas realmente potentes: Jeff Lemire y Andrea Sorrentino, Brian Michael Bendis con David Márquez, Mark Waid con Mahmud Asrar… Pero de todas ellas es esta la que más ganas tenía de ver. ¿Por qué? Porque siempre me pareció un error separarles para que Bachalo le pudiera echar una mano a Bendis con su Imposible Patrulla-X. Sí, la serie de Cíclope y los suyos salió reforzada, pero eso también significó el principio del fin de una colección que se atrevió a hacernos soñar con un cambio de guardia en el mundo de los mutantes.
Ahora quedan muy lejos los tiempos de Oya, del rebelde Quire o del adorable Nydo. Mientras tanto Jason Aaron ha seguido creando magia a través de una de las mejores etapas que se recuerdan dentro de la cabecera de Thor y saltando al espacio gracias al regreso de Star Wars a la editorial propiedad de Disney, pero hacía falta volver a ver a estos dos juntos. Tienen una química especial que logra convertir al habitualmente discreto Stephen Extraño en la auténtica estrella del rock que es. Un tipo que tan pronto está huyendo en cueros de una masa enfurecida de monstruos por las colinas que pueblan Central Park como está echando los higadillos tras una copiosa comida de cosas que jurarías que te han devuelto la mirada.
«Todos los puñetazos tienen un precio«
Y encima el argumento se las trae. Algo (alguien) está acabando con la magia dimensión a dimensión. Aaron nos cuenta que existe al menos un Hechicero Supremo en cada realidad alternativa para luego soltar la bomba de su total y completo aniquilamiento a manos de este misterioso antagonista. ¿Qué persigue? ¿Por qué? Parece que aún tardaremos en descubrirlo, si bien es cierto que el guionista parece decidido a llevar pronto a su personaje estrella a la batalla. Y a esta guerra Extraño no irá armado únicamente con sus artes místicas, una de las novedades de esta etapa pasa por un Doctor Extraño más dispuesto a bajar al barro y sacudirse con puños, patadas y mordiscos si hace falta. Y eso, amigos míos, es muy divertido.
Termino volviendo sobre Chris Bachalo, al que le ha tocado la lotería (o bailar con la más fea, según se mire) con este trabajo. El artista se está volviendo loco a dibujar escenarios delirantes con caras donde no debería haberlas y muchos más ojos de los que estamos acostumbrados a contar. ¡Y tentáculos! Tentáculos como para abastecer a todos los bares de aquí a las Rías Baixas. Leer Doctor Extraño está siendo divertido, ¡pero es que verlo lo es más aún! Aaron y Bachalo lo han vuelto a lograr, ya me tienen rendido ante sus pies y no han pasado ni tres meses desde que comenzaran su nueva andadura juntos.
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