«He estado buscando mutados gamma«
Al Ewing está barriendo la casa para que quede lo más limpia posible de cara a los nuevos inquilinos que lleguen después de él. Y pocos números han sido tan claros al respecto como este El Inmortal Hulk #31 (#107) que publica Panini. En él, el guionista apenas sí menciona de pasada a Banner, el Líder y los Hulks que tratan de darle la vuelta a la tortilla para centrarse en toda la galería de secundarios que han venido paseándose por esta colección. Así, tenemos un número enteramente dedicado a Alpha Flight, a la doctora McGowan, a la maltratada periodista McGee… que sólo regresa puntualmente con el torturado Banner para seguir metiéndonos miedo en el cuerpo.
Todo parece apuntar a que, de una manera u otra, las famosas puertas verdes se van a comenzar a cerrar. Y con ellas se acabará el eterno ciclo de muertes y resurrecciones de todos los mutados gamma. Esto devolverá a la serie a su punto de partida original no ya de esta etapa, sino de una que puede bien remontarse a más de un lustro en el pasado. Con un Banner con pocas personalidades que conjugar (la suya, la del Hulk furioso y, como mucho, la de Joe Fixit) y con pocos o ningún aliados en los que apoyarse. Esto, de concretarse, no deja de ser un retroceso bestial para una serie que ha roto esquemas y que nos ha proporcionado a un Hulk terrorífico más allá de lo monstruoso de sus poderes. Regresar una vez más al científico brillante acosado por la bestia escondida en el espejo va a resultar todo un reto para quien se haga con la serie a continuación.
«Lleva nuestras almas. Como máscaras en un escenario«
Que Donny Cates sea ese alguien no termina de tranquilizarme del todo. El guionista está firmando una saga muy interesante en Thor, pero la anterior (con la que abrió su etapa) estuvo llena de altibajos. Además, no es que sea el guionista más estable del mundo (acumula series en las que su paso se ha limitado a un año o a un simple arco argumental) y esto no juega a favor de esperar una nueva saga a la altura de lo que Ewing nos lleva ofreciendo desde hace ya un par de años. Con todo, Cates es una estrella al alza en Marvel y su entrada en Hulk (intercambia los papeles con Ewing, que se irá a Veneno) supone una apuesta firme de la editorial por que esta serie siga siendo una de las más top en el próximo año 2022.
Por el momento lo que tenemos es una grapa que se limita a colocar las piezas que se han ido fraguando a lo largo de toda la colección sobre el tablero de su confrontación final contra el Líder. Si dijera que este no es el final con el que soñaba al principio de la serie estaría dando a entender que en algún momento hemos podido esperar algo de una colección que se ha especializado en llevarnos por lo inesperado y lo sorprendente. Sin embargo, y al igual que los mutantes están teniendo su Krakoa, sí que hubiera aplaudido el establecimiento de ese Hulk frío y calculador que nos ha dado tantos escalofríos cuando se enfrentaba con Roxxon. Habría sido tremendo, sí, pero a un Hulk así nadie lo querría en los Vengadores y en la Casa de las Ideas son muy de hacer regresar a sus personajes a las colecciones que los han visto crecer…
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