«Supongo que me morí, ¿no?«

Marvel, con C.B. Cebulski a la cabeza, se ha propuesto devolver el lustre y el prestigio a los mutantes que han ido perdiendo tras una serie de catastróficas decisiones editoriales que les llevaron de estar en pleno renacimiento (tras la estupenda Vengadores vs Patrulla-X de 2012) al borde de una nueva e innecesaria extinción cuando la Casa de las Ideas decidió apostar por los Inhumanos (cuyos derechos cinematográficos SÍ tenía) y se sacó de la manga la toxicidad de las nieblas terrígenas para poder cepillárselos a gusto. Ahora, con los mutantes de vuelta a las filas fílmicas de Marvel gracias a la compra de Fox por parte de Disney, toca hacer borrón y cuenta nueva, deshacer todas las muertes mutantes de la última década y volver a guardar a Medusa y Rayo Negro en el armario hasta que se les vuelva a necesitar (quienes me conozcáis sabréis que esto último me apena muchísimo).

Los movimientos dentro de este regreso a los comienzos han sido muchos en el último año. Charles Soule ya ha traído de vuelta a Charles Xavier y está a literalmente semanas de hacer lo propio con Lobezno; quienes hayáis leído eXterminio ya sabréis que Ed Brisson ha dejado plantada la semilla para el retorno de Cíclope y Mathew Rosenberg (guionista del cómic que nos ocupa hoy) trajo de vuelta a Jean Grey en un cómic precioso y está involucrado, junto con Brisson y Kelly Thompson (Sr. y Sra. X), en la muerte y resurrección que pretende ser para la franquicia la saga Patrulla-X Desunida que llega a nuestro país con lo tres primeros números de la Imposible Patrulla-X. Ahora, el propio Rosenberg es el encargado de hacer volver de la tumba a un mutante que nadie esperaba y que va a tener (está teniendo) un enorme peso en el crossover muti que acabo de mencionar. Me refiero a Jamie Madrox (aka. el Hombre Múltiple), un personaje tan interesante como poco dado a tener guionistas a su altura.

«Pero sabes como funcionan las balas, ¿verdad?«

Lo último que supimos de Madrox fue que las nieblas terrígenas acabaron con él y con todas sus copias de una manera horrible y dolorosa. Fue el recurso fácil al que recurrieron Jeff Lemire y Soule para ilustrar la peligrosidad del compuesto químico que despierta los poderes de los inhumanos. Nada mejor que una isla repleta de cadáveres de la misma persona para perturbar nuestras mentes. Sin embargo, la limpia de Muerte de X se limitó a los nombres de Cíclope y este personaje y ha sonado siempre más a una excusa para terminar de dar salida a Scott Summers que a un intento por hacer algo relevante a nivel editorial (máxime cuando poco después se daría marcha atrás con el enfrentamiento entre mutantes e inhumanos que significaría el fin de la amenaza terrígena y el principio del declive de los súbditos de Medusa). La idea de traerle ahora de vuelta es más una cuestión de justicia poética que una necesidad determinante, pero lo cierto es que Rosenberg le ha querido dar al Hombre Múltiple la relevancia que siempre ha merecido y que me aspen si no lo consigue entre éste y el cómic de la Imposible Patrulla-X.

Hombre Múltiple: Todo Tiene Sentido al Final

El título de esta miniserie, Todo Tiene Sentido al Final, no podía ser más acertado. El guionista nos plantea una historia loquísima que nos zarandea una y otra vez y nos desconcierta capítulo tras capítulo hasta que, por fin, comienza a cobrar sentido cerca de su desenlace. Pero, al contrario que otras veces en las que me he quejado amargamente de este tipo de guiones, Rosenberg nos desorienta voluntariamente y con tal habilidad que, pese a no tener ni pajolera idea de lo que está sucediendo, nos divertimos como locos con cada nueva ida de pinza que leemos. El Hombre Múltiple con el que nos encontramos en estas páginas está tan despistado como nosotros y es desternillante ver cómo trata de contener el mar con las manos. Es, con total seguridad, el cómic más al límite que ha escrito su autor y resulta una auténtica maravilla a la hora de acometer una renovación real (y necesaria) de la enorme familia mutante. Sólo espero que esta propuesta tenga vida más allá de Patrulla-X Desunida. Estoy impaciente por ver qué nuevas locuras nos plantea esta versión americana de Naruto.