«La anomalía representa inestabilidad y caos«
Tercera y última parte del tríptico destinado a celebrar los treinta años del simbionte más famoso de la Casa de las Ideas (y el original ya de paso) y a aprovechar la película que Sony acaba de estrenar sobre la versión alquitranada de Spiderman. En Universo Veneno (y en su prólogo) ya vimos a Eddie Brock de nuevo vistiendo al klyntar y enfrentándose a ingentes hordas de una nueva especie de villanos alienígenas, los ponzoñas, empeñados en asimilar a los simbiontes para crecer, empoderarse y (ya de paso) conquistar la galaxia y el resto de realidades. La historia, escrita por Cullen Bunn, tuvo continuación en Patrulla-X Azul (que escribe también este guionista) y ahora encuentra su término en un nuevo crossover con formato de miniserie que publica Panini en su Colección 100%.
Toda esta historia no ha buscado en ningún momento otra cosa que no sea la simple y llana diversión a la par que Brock se vuelve a asentar e identificar con su simbionte tras años siendo éste parte de Flash Thompson (ahora convertido en el Agente Anti-Veneno) y hemos de decir que al menos ese objetivo se cumple con creces. Sobre todo en este último número que, al no necesitar presentar ningún personaje, puede centrarse en la acción y el divertimento puros y duros. Venenizados es un tomo que celebra lo mejor y lo peor de Veneno y lo prepara para su nueva vida, alejado de los modos de su anterior portador, pero convertido en el rudo antihéroe que, fallidamente, el nuevo filme nos ha querido presentar.
«El viejo Cletus los trinchará bien«
Sin embargo, Bunn hace tan buen trabajo con esta trama que nos ha dejado con un buen puñado de nuevos personajes para que otros autores disfruten en el futuro y con una interesante historia de cara a que (con un cierto número de retoques) Sony aproveche en el futuro si sigue con la idea de crear un ‘Venomverso‘. Todo este evento tiene la ventaja de poner sobre la mesa a los principales personajes de la vida del simbionte (léase aquí a Spidey, Matanza y Anti-Veneno) para darles una historia en común que les haga luchar en el mismo bando… al menos durante parte de la trama. No resulta tan complicado imaginar una segunda película centrada en Cletus Cassidy (ya presentado al final de la primera con la aparición estelar de Woody Harrelson), una tercera en torno al asesino de simbiontes que aquí porta Flash y un cierre a la historia con los tres contra un ejército de ponzoñas.
Además, Bunn no puede resistirse a traer de vuelta a alguno de sus personajes de recientes colecciones para darles una segunda oportunidad de brillar y así, con suerte, lograr que su presencia en el universo Marvel se convierta en algo más que una nota a pie de página. Es el caso de Kid Kaiju, extraído directamente del descafeinado crossover Monsters Unleashed y con una importancia capital en la aventura que aquí se relata. También aparecen con esta idea personajes tan dispares como Elsa Bloodstone o Lunella (una de las posibles ‘víctimas’ de Legacy). Venenizados, pues, cumple y además ofrece más de lo que se le podría pedir. Es una lectura accesoria, pero muy divertida y recomendable.
Deja un comentario: