«Mi primera contracción alcanzó un 5.0 en la escala de Richter«

¡Estúpido y sensual Donny Cates! Confieso que he llegado tarde a su obra, a través de la espiral de locura que han supuesto su etapa en Thanos, el Motorista Fantasma Cósmico y sus Guardianes de la Galaxia en la Casa de las Ideas, pero el muy mamón me ha ganado por completo a base de jugar siempre al límite, de coger a los personajes de siempre y darles una vuelta retorcida, de jugar con los argumentos que ya conocemos y presentárnoslos desde una nueva perspectiva: la suya propia. Ni mejor ni peor, pero sin duda delirante.

Desde el púlpito que le ofrece Aftershock tanto a él como a otros muchos autores insignes de las dos grandes editoriales norteamericanas para que se desmelenen de las siempre estrictas continuidades, Cates nos presenta un relato que ya hemos presenciado millones de veces: una chica estadounidense da a luz al anticristo y mientras la madre, inconsciente de lo que está trayendo al mundo, protege a la criatura, antiguas organizaciones se pondrán en marcha para acabar con la vida del retoño (por aquello de que al crecer no sea él quien acabe con la humanidad). La gracia no está en la historia, sino (como suele ocurrir en estos casos) en cómo se cuenta: el guionista convierte a la madre, una cría de dieciséis años, en la narradora de la historia al hacerla grabar vídeos con su móvil dirigidos a su bebé, para cuando sea lo suficientemente mor como para comprenderlos.

«Mi padre… tu abuelo… es la persona más fuerte que he conocido«

Mezcla así el guionista a partes iguales ternura y satanismo. El tono narrativo es el de una adolescente que adora a su criatura, pero teme a toda una sociedad que aún no comprende, pero  la historia que se nos cuenta es un clásico cuento de terror como los que ya hemos visto y leído otras veces, cada vez que un autor ha decidido jugar con el tema de los hijos del Diablo. El contraste entre el tono del relato y la historia que se está contando hace de Babyteeth una joya divertidísima de leer, repleta de ese humor negro que tanto caracteriza al autor y con la capacidad de mantener el suspense en todo momento, pese a que (más o menos) sepamos hacia dónde nos dirige la trama. El primer volumen de Babyteeth (que contiene los cinco primeros capítulos de la colección) se lee del tirón y se disfruta durante cada una de sus páginas, incluyendo las de los extras (una extensa galería de portadas y un ‘cómo se hizo’) que rematan el álbum.

Babyteeth #1

Cuando Planeta Cómic tenga a bien continuar con la serie (en Estados Unidos ya van por los catorce capítulos publicados mientras que en España habremos de esperar a 2020 para leer los capítulos del seis al diez) iremos descubriendo más cosas alrededor de la figura de un infante que da tanto mal rollo que asusta (pese a no tener más que unos meses de edad), pero a quienes más esperaremos es a la estupenda galería de secundarios (otra de las fantásticas habilidades de Cates es generar este tipo de personajes) que rodean a Clark (como Superman se llama el retoño) y Sadie. Heather, que precede a estas líneas, es una locura. Una valquiria que no conoce el miedo y que sólo le debe lealtad a su familia. Una mala bestia que es compañera, confidente y guardiana de su hermana pequeña. Alrededor de ellas veremos aparecer a asesinos sureños, mapaches demoníacos y brujos siniestros. No sé vosotros, pero yo me muerdo las uñas esperando al siguiente tomo de esta colección.