Llega un momento de vital trascendencia en la reedición que está haciendo Panini Cómics de El Asombroso Spiderman dentro de la colección Marvel Saga. Con el arco argumental El origen de las especies se cierra el capítulo Un día más, la etapa deudora del polémico «descasamiento» entre Peter y Mary Jane narrado por J.M. Straczynski, y la etapa que serviría de preludio para el desembarco de Dan Slott como guionista fijo a partir de A lo grande hasta el todavía lejano The Amazing Spider-Man #801.
Para esta despedida, el equipo de escritores encabezado por Mark Waid pone al trepamuros en el foco de atención de toda Nueva York. El alcalde Jameson, la policía, una nutrida representación de villanos encabezados por Doctor Octopus, ciudadanos corrientes cámara en mano… parece no haber nadie que no esté buscando o siguiendo los pasos Spiderman. Un estrés mayúsculo para el personaje, que por momentos da la impresión de volver al contexto de El desafío, saga en la que Peter sufría un acoso y derribo constante de algunos de sus peores villanos. De hecho encontramos incluso algún guiño a dicha saga, con la aparición de escenarios como la mansión Kravinoff.
En esta historia, sin embargo, hay un pequeño matiz que evita la mera repetición de esquemas. Los villanos no buscan tanto acabar con la vida de Peter (en esta ocasión derrotarle es un aliciente), sino hacerse con el bebé que nuestro héroe intenta proteger a toda costa. Por motivos que no vamos a desvelar aquí, Octopus y otros tantos personajes tienen la imperiosa necesidad de raptar a un neonato y solo Spidey se interpone entre el pequeño y sus maquiavélicos planes. Comienza así una persecución por toda la ciudad con Parker convertido en niñero improvisado yendo de aquí para allá. Esto propicia la oportunidad a Mark Waid de jugar con situaciones de verdadero peligro para la peculiar pareja, como con otras que explotan la comicidad de la araña.
Como cierre de etapa, en El origen de las especies no faltan las apariciones estelares de los amigos de Peter. Desde Mary Jane o Harry Osborn, con bastante incidencia en la trama central, a tía May, Jonah Jameson o Flash Thompson quienes, cada uno a su manera, recuerdan a nuestro protagonista quién es y por qué lucha cada día como Spiderman. En este aspecto cobra especial interés The Amazing Spider-Man #647, compuesto por relatos breves de los autores que han ido pasando por la cabecera desde el comienzo de Un nuevo día como Fred Van Lente, Zeb Wells o Dan Slott, rindiendo sus particulares homenajes al trepamuros y su influencia en la gente de Nueva York. Además del arco argumental reseñado, el tomo incluye el Annual #37, que relata una historia compartida entre el héroe arácnido y el otro gran símbolo de la editorial: Capitán América. Nada mejor para cerrar una etapa y abrir otra «a lo grande».
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