«Sé lo que estáis pensando«

Por fin ocurrió. El regreso de Charles Xavier, una obviedad desde el primer número de esta colección, finalmente tiene lugar en el sexto número de Increíble Patrulla-X. No está exento de polémica y dudas, pero al menos ya se ha formalizado y a partir de él podemos comenzar a diseñar el futuro de las aventuras mutantes en Marvel Legacy. Un futuro que, con hasta entre cinco y siete series relacionadas con esta parte del universo Marvel, hacía años que no pintaba tan bien ni tan luminoso.

Si bien habría que hacerse mirar tanto retorno de golpe. Hemos pasado de que la guillotina haga su trabajo de manera inclemente con Jean Grey, Xavier, Lobezno y Cíclope a que estos mismos personajes vayan volviendo casi en el mismo orden en el que se fueron (a Scott Summers todavía no se le espera, pero ya caerá), pero con una diferencia de semanas entre uno y otro. Que sí, que está muy bien y  que es parte del espíritu de esta nueva etapa, pero la acumulación va en detrimento de la espectacularidad y si la Resurrección del Fénix me encantó, el regreso del profesor X ya no ha logrado tener ese efecto de reencuentro que sí tuvo la serie de Matthew Rosenberg.

«No le haces daño. Le alimentas«

También es verdad que las circunstancias en que cada uno ha vuelto son radicalmente distintas. Al Fénix lo persigue la práctica totalidad del universo mutante (comandados todos por Kitty) mientras que Charles aparece en mitad de una terrible batalla y se encuentra de golpe y porrazo con otra gran amenaza en los primeros cinco minutos desde su retorno al mundo de los vivos. Quizás la parte emotiva la veamos más adelante, puede que cuando el telépata regrese a la escuela en West… en Central Park, pero de momento él y el equipo de mutantes con los que ha contado para su liberación tienen problemas más acuciantes a los que hacer frente. Porque junto a Charles regresa otro personaje con solera y la pelea contra este nuevo villano va a suponer toda una prueba de fuego para la nueva encarnación del otrora líder mutante.

Increíble Patrulla-X #7

Porque como bien dice Logan, nadie regresa de la muerte igual a como era cuando se fue, y este nuevo X (así se hace llamar en estos primeros compases de su nueva vida de prestado) puede compartir con su antecesor ciertas características y parte de su carácter y arrogancia, pero hay en él una parte oscura que no termina de convencer ni a sus compañeros ni a nosotros, los lectores. La manera en que encara a su enemigo al final de Increíble Patrulla-X #8 es un claro ejemplo. ¿Un profesor X que cambia de pronto de dirección y que toma decisiones sin pensar en las consecuencias? esto no puede acabar más que con él de nuevo postrado en una silla, por aquello de que le de tiempo a recapacitar.

«Hay algo en cómo lucha la Patrulla-X«

La parte artística de estos tres números corre a cargo de artistas de muy distinto palo. De Increíble Patrulla-X #6 se ocupa Mike del Mundo, un autor al que comencé a seguir personalmente gracias a la interesante Relatos Salvajes que se publicó como tie-in de las Secret Wars de Jonathan Hickman. Su dibujo es uno de los mas bonitos, coloridos y diferentes de contemplar en el panorama actual y su interpretación del Rey Sombra y sus contendientes merece la pena ser vista. Le sigue, en el séptimo tomo de la colección, Phil Noto (no hay que dejarse engañar por la portada de Mike Deodato Jr.), mucho más simplista y amante de los trazos clásicos para representar a los héroes y cierra la terna Paulo Siqueira, con un estilo bastante más estándar (y versátil) dentro de lo que podemos ver hoy en día en el mainstream comiquero.

Increíble Patrulla-X #8

Charles Soule parece el dueño de la vida y la muerte de los mutantes. Tras llevarse por delante a Logan en la digna Muerte de Lobezno, es ahora el encargado tanto de recuperar a uno de los personajes centrales del Olimpo mutante como al mismo personaje al que dio la puntilla. Es normal, el guionista sabe bien lo que se hace y parece sentirse a gusto con historias en las que controla tanto el comienzo como su final (menuda diferencia con los Inhumanos, de los que le largaron sin contemplaciones). Durante un tiempo se temió que, junto a Bendis y Lemire, éste fuera uno de los autores que abandonaría la Casa de las Ideas. Ahora los fans parecen tener la oportunidad de respirar aliviados. Soule se queda.