Smile

Smile: Sonrisas terroríficas

Vamos a decirlo sin cortapisas, para contextualizar y saber desde el principio dónde nos encontramos. Parker Finn es súper fan del remake que hizo Gore Verbinski de la japonesa Ringu (The Ring) en 2002. Sosie Bacon es una suerte de Naomi Watts que pasa por sus mismas situaciones y sufre de igual manera. Suponemos que de forma inconsciente, al convertir Laura Hasn’t Sleep (2020) en un largometraje el director no ha podido evitar acudir a un desarrollo narrativo que nos es terriblemente familiar. Si tenéis en mente The Ring, más allá de los jump scares de turno poco os va a sorprender de Smile.

 

Sosie Bacon

 

Esto quiere decir que si tenéis el referente presente y sois de los de decir «esto ya lo he visto» con aires de suficiencia, ahorraos el visionado. Esta película no es para vosotros. Si por el contrario acudís al género sin filtros ni prejuicios o -sobre todo- no conocéis el referente porque las películas de más de 15 años os parecen de otra época, no dudéis en apostar por Smile.

 

Porque si algo tiene Smile es que resulta sumamente entretenida. Obvio. Si la cinta a la que evoca en todo momento lo era, esta no puede ser menos. El director se zambulle en los lugares comunes del subgénero de las maldiciones, no falta ninguno de sus tópicos; pero lo hace a través de una apuesta estética angustiosa y, por momento, truculenta que bebe -también- directamente del J-Horror. Junji Ito firmaría gustoso algunos de los diseños propuestos por Smile.

 

Kyle Gallner

 

Smile apuesta por revivir los modos (y moda) del terror hollywoodiense de principios de los 2000, pero refinando el estilo visual buscando la asimilación de propuestas de carácter independiente, mucho más dadas a jugar con planos y encuadres y usando un color más desaturado que agudiza la pretendida angustia de su protagonista, aislada de todos quienes la rodean por culpa de la maldición que padece.

 

En este aspecto conviene destacar tanto el trabajo de Sosie Bacon en el papel principal, como la música de Cristobal Tapie de Veer, indispensables ambos para conformar la imaginería de Smile. Porque el fuerte del título de Parker Finn radica en la forma en que transmite el malestar y el horror. Una sonrisa nunca había sido tan perturbadora como en Smile.

Acerca de Daniel Lobato

Avatar de Daniel Lobato

El padre de todos, pero como a Odín, se me suben constantemente a las barbas. Periodista de vocación cinéfila empecé en deportes (que tiene mucho de película) y ahora dejo semillitas en distintos medios online hablando de cine y cómics. También foteo de cuando en cuando y preparo proyectos audiovisuales.

Deja un comentario:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos relacionados