«Tenemos un grupo de gusanos kokkovianos en el culo«

Sean Murphy. Me ha bastado con leer esas dos palabras para saber que quería leer el tomo de The Plot Holes que iba a poner a la venta Norma Editorial. Parece mentira que hayan pasado ya casi diez años desde que descubrí a este autor a través de su loquísima Punk Rock Jesus, pero la hemeroteca está ahí para que me sienta un poco más mayor. La cosa es que vi el título de esta obra y de qué iba el argumento y la cosa ya comenzó a llamarme. Ver luego que Murphy estaba al frente no hizo sino apostarlo todo. Porque este señor desprende alguna clase de energía que contagia a quien cae en sus redes casi sin darse cuenta. Punk Rock Jesus debería haberme tirado para atrás y ahora guardo ese cómic con cariño. Su Batman: Caballero Blanco se ha convertido en una de las mejores obras-homenaje al justiciero de Gotham que hayan pasado por mis manos (sobre todo su primera parte). Hay algo en su narrativa que es adictivo y es innegable que ha ido perfeccionando su estilo artístico con el paso de los años.

Hay un canal en YouTube que en casa vemos con bastante regularidad y que viene a ser la traducción al castellano de este cómic. Los agujeros de guión que nos desvelan los vídeos de Andoni Garrido son esas cosas que ocurren cuando un editor se pasa con la tijera y rompe la lógica de una película (o cualquier otra obra) o cuando un autor poco organizado se carga la coherencia de lo que está creando la introducir contradicciones y giros ilógicos de guión que dañan tanto al argumento como a los personajes que lo protagonizan. Como nos hemos acostumbrado a ver en las publicaciones de este youtuber, una película puede tener un buen puñado de estos fallos y seguir siendo buena, pero para todo hay un límite. Y ahí es cuando la cosa se hace infumable. Ahí es cuando han de actuar The Plot Holes, un grupo que surca las diferentes ficciones antes de que vean la luz en busca de contradicciones, fallos y pifias que condenen a buenas ideas al ostracismo. Y Cliff Inkslayer es su miembro más reciente.

«Pero tú fuiste escrito para ser racista, cascarrabias y xenófobo«

He de dar la razón a todos los que critican a esta obra en redes y otros medios: el argumento es demasiado complicado para lo que dura la acción, dándole a este cómic un ritmo un tanto atropellado. Además, el precio al que lo publica Norma no es la mejor de sus ayudas para que nos lancemos a por él. Pero entonces es cuando entra en acción la magia de Murphy. Porque, aún sabiendo todo esto, uno devora The Plot Holes en menos de lo que tenía pensado. Sus personajes son carismáticos, la historia mola y el universo que el guionista crea es tan potente que uno termina queriendo leer más y más de él (quizás por eso también se nos hace tan corto el cómic).

The Plot Holes

The Plot Holes está repleto de referencias directas (Moby Dick, Pokémon, Robin Hood…) e indirectas (joder con el personaje de Kevin) a clásicos de la literatura y del mundo del cómic universal y es un canto a la creatividad y a todas las historias que se pierden en la edición, descartadas por ser auténticas locuras o por la simple pereza de quien comenzó a escribirlas. El álbum que se saca ahora de la chistera Norma tiene el poder de hacernos esbozar una sonrisa en más de una ocasión recordadno todas esas historias que leímos alguna vez y ahora casi no recordamos. Y además viene acompañado de una ingente galería de extras. Yo compro.