«¿Cuando volvamos? Qué optimista por tu parte«

Paraos a pensar un momento. Actualmente DC (ECC en España) está publicando Héroes en Crisis, un crossover en el que Tom King está diseccionando la mente de los principales héroes de la editorial. También está comenzando a serializar El Reloj del Juicio Final, la colección (que analizaremos próximamente por aquí) con la que Geoff Johns continúa por fin con los acontecimientos relatados en Universo DC: Renacimiento y Batman / Flash: La Chapa. Y a la vez de estos dos grandes crossovers, Scott Snyder está escribiendo una etapa para la Liga de la Justicia que ha elevado el tono de la amenaza a niveles multiversales y que ha reunido en una misma colección a algunos de los principales héroes deceítas… y a sus principales enemigos. Tenemos a Superman, Batman, Wonder Woman… contra Lex Luthor, el Joker, Cheetah… en una carrera por hacerse con la que quizás sea la mayor fuente de poder y conocimiento del mundo y, a la vez, el posible motivo de su destrucción.

DC está jugando muy fuerte con dos eventos oficiales y un tercero que a las claras tiene un impacto igual o mayor a los otros dos en el día a día del universo editorial y está logrando, de momento, que ningún evento se pise con el resto. Cuesta saber (en DC siempre pasa igual) en qué momento del tiempo está ocurriendo cada cosa, pero eso también significa que Batman puede estar confraternizando con Rorscharch al tiempo que investiga los sucesos del Santuario y trata de evitar la ruptura del Muro de la Fuente. Quizás los lectores no terminen de digerir el asunto (menos aún si tenemos en cuenta que el Hombre Murciélago está enfrentándose a sus propias pesadillas de la mano de King y al Batman que Ríe por obra y gracia del propio Snyder), pero en global esto nos está permitiendo tener varias historias muy interesantes publicándose a la vez en la editorial.

«Se supone que está muerto… Murió en mis brazos«

Lo interesante de que Snyder esté contando con las páginas de la Liga de la Justicia para contar su historia es que, al no estar limitado por la duración habitual de un evento (entre seis y diez entregas) está logrando desarrollar la trama y a los personajes que de ella participan con una gran profundidad. No sólo estamos viendo cómo los principales héroes y villanos de DC se parten la cara por poseer los secretos que hay tras la creación del universo, sino que estamos teniendo la oportunidad de disfrutar de pequeños momentos de protagonismo con cada uno de los personajes de cada bando. es el caso del Joker, que en Liga de la Justicia #10 se baja del barco comandado por Lex de la única manera en que el Píncipe Payaso del Crimen sabe, con violencia y risas histéricas. O es el caso de Hawkgirl, cuya relevancia en toda esta etapa es tan grande que empequeñece los papeles del resto de héroes en más de una ocasión.

Liga de la Justicia #12

Scott Snyder parece haber entendido que para un gran grupo de superhéroes hace falta un nivel de amenaza que, al menos, los iguale. Se podrá criticar más o menos la manera en que DC está explotando a sus personajes más exitosos, pero no se puede decir que el guionista nos esté dejando con una serie que resulte fácil olvidar. Al final triunfarán los buenos (aunque falte saber a qué precio), pero por el camino habremos podido disfrutar de una gran historia que vertebre toda la etapa del guionista en lugar de una serie de pequeñas aventurillas como se nos estaba obligando a leer en los últimos tiempos. Hacen falta grandes males para reunir a los más grandes equipos y este es un mantra que no se nos debería olvidar jamás.